Navidad en Nueva York

Todo Manhattan se llena de espíritu navideño en vísperas de las fiestas. De los cinco distritos de Nueva York, es sin duda el más festivo y el más decorado. La isla de Nueva York alberga las mayores atracciones turísticas de la ciudad y es el escaparate de la Gran Manzana. También alberga muchas boutiques de lujo, lo que la convierte en el distrito más rico. Así que es lógico admirar las suntuosas iluminaciones que adornan las fachadas de los edificios de Manhattan.

En Estados Unidos, el árbol de Navidad del Rockefeller Center se ilumina en la NBC. Este árbol es uno de losárboles de Navidad más famosos del país, una tradición que se mantiene cada año desde 1931. El árbol elegido, a menudo un abeto, mide entre 23 y 27 metros de media, y se ha convertido en un auténtico símbolo de la ciudad en Navidad. Está decorado con 30.000 luces y 8 kilómetros de guirnaldas eléctricas.

El árbol de Navidad se coloca todos los años, en noviembre, en la explanada del Rockefeller Center y se convierte en una visita obligada para los curiosos y turistas que acuden a Nueva York con motivo de las fiestas.

También está elárbol de Navidad frente al centro financiero de Wall Street, que, aunque menos emblemático que el árbol gigante del Rockefeller Center, no es menos mágico. Al caer la noche, el árbol se ilumina, al igual que las columnas del monumento, que se transforman gracias a la magia de la proyección de luz en bastones de caramelo navideños rojos y blancos.

Desde 1936, la instalación del árbol de Navidad gigante en el Rockefeller Center va acompañada de la creación de una gigantesca pista de hielo temporal a sus pies. Esto ofrece a turistas y neoyorquinos por igual una actividad mágica para disfrutar en vísperas de las fiestas. En este espléndido marco, bajo la grandiosa decoración del complejo del Rockefeller Center, podrá vivir un momento suspendido en el corazón de la ciudad-mundo.

La famosa pista de hielo está abierta varios meses, a menudo desde principios de noviembre hasta principios de marzo, así que hay tiempo de sobra para domar el hielo o aprender a patinar. En un entorno tan emblemático, ¡sería una pena no aprovechar tu estancia en Nueva York para iniciarte!

La pista de patinaje de Central Park, conocida como "Wollman Rink", también es muy popular entre lugareños y visitantes. En este entorno verde se puede patinar con los rascacielos de Manhattan de fondo: ¡una experiencia que parece casi irreal!

El distrito financiero también tiene su propia pista de hielo, en Brookfield Place. Está mucho menos concurrida que en el corazón de Manhattan, y se disfruta de una preciosa vista del puerto de Nueva York. Y si buscas una pista de hielo gratuita, acércate al mercado navideño de Bryant Park.

Aún no hemos terminado de hablar del Rockefeller Center, formado por numerosas tiendas y salas de conciertos, como el Radio City Music Hall, cuya fama ha traspasado las fronteras de la ciudad y del país.

Apodado "The Showplace of the Nation", el Radio City Music Hall y su fachada no son una excepción a la regla, deslumbrándonos con sus hermosas decoraciones navideñas, famosas en toda la ciudad.

Macy's es el equivalente de los Grands Magasins parisinos, sólo que más grande y lujoso. La franquicia también es conocida por tener la tienda más grande del mundo, según consta en el famoso Guinness World Records, con una superficie de 198.500 metros cuadrados en el corazón del edificio Herald Square de Manhattan.

Es la tienda insignia de la marca y, sin duda, la más emblemática. Cada año, su transformación para la Navidad es todo un acontecimiento. De hecho, es el desfile de Macy's por las calles de Manhattan el que señala oficialmente el comienzo de las fiestas de fin de año y de las compras navideñas en Nueva York.

Como todas las grandes ciudades y metrópolis, Nueva York no es una excepción a la regla de los mercados navideños. Cuando vea las grandiosas iluminaciones de la ciudad, imagínese la belleza de su mercado navideño. O deberíamos decir... ¡SUS mercados de Navidad!

Hay cuatro mercados en la ciudad: uno en la estación Grand Central, otro en Columbus Circle, otro en Union Square y, por último, uno en Bryant Park, que es sin duda el favorito de turistas y neoyorquinos por igual, ya que está repleto de puestos de regalos, comida y bebida y una magnífica pista de hielo.

El glamuroso distrito de Manhattan no tiene el monopolio de las luces navideñas. Los distritos más populares y residenciales, como Brooklyn, también se contagian del espíritu festivo. El famoso puente de Brooklyn, que marca la entrada a este barrio, marca inmediatamente la pauta con sus espléndidas iluminaciones en mágicos tonos rojos, blancos y verdes.

En Brooklyn también hay un barrio que da que hablar en Navidad. Los habitantes de Dyker Heights no se andan con chiquitas a la hora de decorar sus casas y jardines con guirnaldas de luces y adornos. Papás Noel de tamaño natural, trineos iluminados, muñecos de nieve gigantes, villancicos a todo volumen por los altavoces... ¡es casi extravagante! Este distrito ofrece a los visitantes un espectáculo de luz y sonido sin igual, con la magia de la Navidad como telón de fondo.