Sumérjase en el corazón del carnaval de Niza, con sus colores, fiestas e iconos.

Oficialmente inaugurado en 1873 y organizado por el Comité des Fêtes, se cree que el Carnaval de Niza se originó mucho antes, ¡hace casi mil años! Se dice que el Conde de Provenza, Carlos de Anjou, visitó la ciudad en 1294 con motivo de "los alegres días de Carnaval". Es, sin duda, un acontecimiento que no hay que perderse, ¡y siempre lo ha sido!

Después de Navidad y Año Nuevo, el comienzo del año es sinónimo de Carnaval en muchos países y ciudades. En Francia, Niza es la que atrae a más público, gracias sobre todo a las carrozas que la hacen tan famosa. Todos los martes y sábados del periodo festivo, al caer la noche, los espectadores pueden asistir al desfile de carnaval para admirar las relucientes carrozas.

Rey de los Medios de Comunicación, Rey de los Animales, Rey de la Gastronomía y Rey del Espacio son algunos de los temas de ediciones anteriores, orquestados por los ymagiers. Su Majestad, el Rey del Carnaval, cambia de título cada año para dar comienzo a las fiestas. Después, junto con la Reina, ocupa su lugar en la plaza Masséna hasta la última noche. Los visitantes tienen la oportunidad de conocer a esta singular pareja real...

Mientras toda la ciudad cobra vida, el Rey y la Reina entran en Masséna, tras haber tomado las llaves de la ciudad, e inauguran los distintos desfiles. Sólo la última noche, su majestad desfila por última vez antes de ser quemado en la hoguera, poniendo fin al carnaval. Pero, según la leyenda, el rey resucita y vuelve a reinar al año siguiente...

La mejor manera de aprovechar al máximo el acontecimiento es alojarse lo más cerca posible del lugar de celebración y desplazarse exclusivamente a pie. Asegúrese de reservar con suficiente antelación, ya que los alojamientos están muy ocupados durante este periodo.

El punto culminante del carnaval de Niza es sin duda el corso carnavalesco. Dos veces por semana, los martes y los sábados, las tribunas se llenan de carrozas. Una veintena de carrozas y decenas de comparsas internacionales componen el desfile iluminado. Para los más madrugadores, el programa incluye también una versión diurna del desfile. Bandas, artistas callejeros y bailarines animan a la multitud durante unas horas eternas que no nos perderíamos por nada del mundo.

No sólo las carrozas y los carnavaleros se engalanan con multitud de colores y motivos. Los espectadores están invitados a jugar al juego de los disfraces, ¡y los nizardos son maestros en la materia! Algunos no son una excepción a la regla y acuden cada año desde que eran pequeños, luciendo accesorios con los colores del tema del año.

Entre las tradiciones que acompañan al Carnaval, hay un manjar que no puede perderse. Las ganses de Niza, una de las muchas especialidades culinarias de la ciudad, son una auténtica delicia para los golosos. Estas pequeñas rosquillas crujientes se comen mejor espolvoreadas con azúcar glas (y a cualquier hora del día). La mayoría de las panaderías de la ciudad ofrecen para la ocasión esta mezcla de harina, huevos, mantequilla, azúcar y levadura.

Niza es una ciudad elegante y colorista, y la Batalla de Flores del carnaval no es una excepción. Los organizadores utilizan los productos de los floristas locales para decorar las carrozas con miles de tallos. Es un trabajo de rapidez, precisión y creatividad, realizado por entusiastas para ofrecer a los participantes un momento de encanto, ¡en un paraíso floral!

El escenario es único en el mundo, con disfraces cuya elegancia y belleza inspiran a otros carnavales del mundo. Los participantes suelen volver a casa con tantas flores, repartidas por las modelos de las carrozas, ¡que pueden hacer un auténtico ramo! Miles de rosas, mimosas, liliums y claveles se colocan en las carrozas horas antes del comienzo del carnaval.

Los corsos de carnaval y las batallas de flores son los actos más destacados de las dos semanas de fiesta, pero también hay muchas otras actividades. Concursos de disfraces, batallas de confeti, espectáculos musicales, talleres creativos, proyecciones y conferencias para grandes y pequeños.

El ambiente cálido y festivo seguro que le tienta a probar uno de los muchos restaurantes de estilo provenzal de la ciudad. La Merenda, muy cerca del recinto, es una forma segura de sumergirse en la cultura de Niza. La pasta pistou, la pissaladière, el daube de ternera y los buñuelos de flor de calabacín harán las delicias de los visitantes de la Costa Azul.

📍Dirección: 4 Rue Raoul Bosio, 06300 Niza

⏰Horario: de 12:00 a 13:45 y de 19:00 a 21:00 de lunes a viernes.

Los restaurantes de la Promenade des Anglais y del Vieux Nice están de moda durante el Carnaval, así que no olvide reservar.