Se puede encontrar piezas de artesanía en los bazares: alfombras, joyas, instrumentos musicales y textiles. Los horarios de apertura de los bazares son más bien anárquicos.
La comida suele consistir en cordero y arroz. Entre las especialidades, destacan los kebabs: carne de cordero a la parrilla servida en naans, el pan local. El qabali palau sigue siendo el plato tradicional, hecho con trozos de cordero asado servidos con arroz y azafrán, zanahorias y uvas. Otra especialidad es el sabzee chalao, espinacas salteadas con ajo y chalotes. Los afganos comen también mucho queso. Los postres se preparan con nueces y fruta fresca o frutos secos. El té sigue siento la bebida favorita de la población.
Por el momento, sólo están autorizados para entrar en territorio afgano los miembros de las organizaciones humanitarias y los periodistas acreditados. Para el resto, los turistas sedientos de sensaciones fuertes, un viaje a esta peligrosa zona puede resultar fatal. Por lo tanto, es mejor esperar hasta que el país sea reabierto al turismo.