La ciudad universitaria más antigua de Alemania, idealmente ubicada a orillas del Neckar, no se trata únicamente de un centro moderno de investigación científica, sino que también es uno de los destinos más apreciados por turistas del mundo entero.
El magnífico castillo de Heidelberg, del siglo XIV, domina la ciudad. Es el corazón simbólico de la ciudad y un lugar perfecto desde el que admirar las vistas al casco histórico y al valle romántico.
El Puente Viejo es uno de los puentes más antiguos de Alemania y es magnífico. Igual que las callejuelas estrechas y animadas del casco antiguo, que te recomendamos que descubras a pie. Sentado en el agradable funicular, construido en 1890, podrás ir de Kornmarkt hasta el castillo y de Molkenkur hasta Königsstuhl.