La segunda ciudad más importante del país, uno de los mayores centros universitarios, reúne edificios coloniales de gran valor arquitectónico. Citemos entre ellos, la gran manzana jesuítica (Patrimonio Mundial de la Unesco), dotada de un colegio-universidad y de la Iglesia y residencia de la compañía de Jesús. Este centro industrial, comercial y de turismo jugó un rol importante durante la guerra de independencia contra los españoles y rivaliza desde entonces con Buenos Aires. Generalmente menos conocida por los extranjeros constituye sin embargo un buen destino de parada entre la capital y el norte argentino.