Nueva Escocia es un archipiélago compuesto principalmente de bahías y abruptos acantilados. Gracias a sus grandes parques de toda la región que preservan el ecosistema de sus grandes lagos, Nueva Escocia se desmarca por lo más precioso que tiene: su entorno.
Los edificios culturales de Nueva Escocia son parte integrante de la historia, algunos de ellos inscritos en el Patrimonio Mundial de la UNESCO. Según la leyenda urbana, es en Nueva Escocia donde se hundió el Titanic.
Nueva Escocia es un lugar costero y la cocina se articula alrededor del marisco. Además del Pétoncle de Digby, se pueden comer otros platos locales de Nueva Escocia: el Caldwer o el Fletran de Nueva Escocia. El whisky es la bebida preferida. Algo atípico en esta región son los viñedos que se cultivan en la costa. Muchos bares y restaurantes proponen descubrir la cocina local de Nueva Escocia.