Faja de tierra a orillas del océano Pacifico de nada menos que 4 300 kilómetros, Chile tiene fronteras con Perú al norte, Bolivia y Argentina al este. País de contrastes, sus paisajes y su clima demuestran la riqueza de su territorio. La Patagonia al sur, el desierto de Atacama al norte y los paisajes montañosos de los Andes en el centro, son algunos de los tesoros ofrecidos por esta tierra. Sin embargo, Chile no se resume a esto, además de un relieve excepcional, el país cuenta con la isla de Pascua que atrae a viajeros apasionados por la naturaleza del mundo entero que deciden viajar para conocer mundo. Este paraíso es un misterio ubicado a 3700 kilómetros de las costas.
En los mercados, puedes intentar regatear, pero no es habitual hacerlo en las tiendas. En el sur del país la población está muy aislada y, aunque discreta, siempre es acogedora. Hacia las cinco o las seis de la tarde, en un bar o en casa, es la hora de la «once», una merienda salada que suele sustituir a la cena. Se comen sándwiches, puré de aguacate, huevos revueltos y queso. Los chilenos también toman mucho té.