Sharja es una ciudad museo, en la que se ha priorizado la construcción de casa bajas en vez de grandes rascacielos como en las ciudades vecinas, pero además posee algunos atractivos importantes: de su cala brota el tercer chorro de agua más alto del mundo después de Ginebra y Yeda. Y en su centro histórico, se eleva la mezquita del rey Faisal, la mayor de los siete emiratos, así como el monumento de la Unidad, que simboliza la fusión política de los emiratos de manera federal. Para conocerla mejor, hay que aventurarse por las callejuelas de Al-Borj Road y husmear por sus mercados llenos de bienes de consumo y productos artesanales.