Tercer país más pequeño de América del Sur, situado entre Venezuela, Brasil, Surinam y el Océano Atlántico, Guyana no es un destino turístico. A pesar de su nombre exótico, no hay largas playas de arena caliente. Sólo alguna pequeña cala. En el interior reina la selva tropical, que se mantiene auténtica y hace de Guyana un auténtico paraíso verde poblado de una flora y una fauna excepcionales. La cumbre del país es el Roraima a 2810 metros de altura, en la sierra de Pacareima. Este monte Roraima es compartido con Brasil y Venezuela. Se trata de una cumbre plana de contornos abruptos que se extiende unos 10 kilómetros de largo por 5 de ancho junto con sus impresionantes de 1000 metros. Pero para hacer esta cima, hace falta tener bastante experiencia ya que dura varios días la ascensión. Las expediciones parten desde Venezuela, pero también existen excursiones en Guyana para disfrutar del pico a lo lejos mientras se explora la selva tropical por los senderos, y se observan la fauna y la flora.
4 grandes ríos atraviesan el país. Uno de ellos, el Essequibo, da lugar al Potaro, río en el que se encuentran las impresionantes cataratas del Kaieteur en el centro del país. Consideradas como la joya de Guyana, estas son poco conocidas ya que están aisladas del resto del país. Un espectáculo de la naturaleza con 226 metros de caída en el corazón de la jungla. Una escapada a realizar en la que observar los diferentes tonos del agua, el canto de los pájaros multicolor y la vegetación exuberante alrededor. En Guyana no encontrarás playas paradisiacas, pero si grandes manglares. El clima húmedo explica que el 76% del país esté recubierto por la selva ecuatorial. Al sur se pueden contemplar las sabanas. No hay que olvidar visitar la selva tropical de Iwokrama. Se extiende a lo largo de 388000 hectáreas. Podrás pasar algunos días en este entorno acampando.
Una botella de ron y objetos de artesanía: esculturas de madera, tejidos pintados con motivos coloridos. Los comercios abren de 08:30 a 16:00 de lunes a jueves, de 08:30 a 17:00 el viernes y de 08:30 a 12:00 el sábado.
Aquí la gastronomía es una mezcla de sabores propios de todo tipo de etnias: india, africana, caribeña, inglesa, americana, etc. Todo el año el país ofrece un muy buen marisco. En navidad, el plato principal es el ?pepper pot?, una carne cocinada con mandioca amarga y hierbas. El ron es la una verdadera institución, una botella no cuesta más que dos dólares. La cerveza local es la Banks, que se hace con arroz.
Con la idea de soportar la gran cantidad de mosquitos que hay, sobre todo en la época húmeda, es necesario vestir amplio y ligero con puños en mangas y piernas. Si piensas estar en la selva, es indispensable llevar una antorcha o lámpara ya que los cortes de electricidad son frecuentes en esta zona. Si deseas quedarte en el parque de Kaieteur, necesitarás una autorización.
Guyana es un destino ideal para los amantes de los animales. En Playa Concha, las tortugas marinas llegan a la arena de la playa en abril para poner huevos. Su eclosión se da en agosto y es un espectáculo digno de contemplar. No lejos de allí, podrás observar macacos, tucanes, etc. La selva de Iwokrama es un lugar único para observar a los jaguares. La sabana de Rupununi alberga cotorras, halcones y cigüeñas. En los manglares vecinos de la costa, suelen crecer iguanas. Si deseas ver mamíferos, como jaguares o tigres pequeños hay que tener bastante suerte y paciencia. El interior de la jungla no deja a nadie indiferente: para unos suscita curiosidad, y a otros maravilla. Bañarse en los ríos está prohibido en la mayoría de regiones ya que están infestados de caimanes.
Con la idea de soportar la gran cantidad de mosquitos que hay, sobre todo en la época húmeda, es necesario vestir amplio y ligero con puños en mangas y piernas. Si piensas estar en la selva, es indispensable llevar una antorcha o lámpara ya que los cortes de electricidad son frecuentes en esta zona. Si deseas quedarte en el parque de Kaieteur, necesitarás una autorización.
Guyana es un destino ideal para los amantes de los animales. En Playa Concha, las tortugas marinas llegan a la arena de la playa en abril para poner huevos. Su eclosión se da en agosto y es un espectáculo digno de contemplar. No lejos de allí, podrás observar macacos, tucanes, etc. La selva de Iwokrama es un lugar único para observar a los jaguares. La sabana de Rupununi alberga cotorras, halcones y cigüeñas. En los manglares vecinos de la costa, suelen crecer iguanas. Si deseas ver mamíferos, como jaguares o tigres pequeños hay que tener bastante suerte y paciencia. El interior de la jungla no deja a nadie indiferente: para unos suscita curiosidad, y a otros maravilla. Bañarse en los ríos está prohibido en la mayoría de regiones ya que están infestados de caimanes.