Gonzalo González Beneytez
Jefe de sección
Un hotel que merece sus 4 estrellas y que disfruta de una ubicación ideal. Ámsterdam se vive y este hotel permite hacerlo gracias a su ubicación de ensueño, en pleno centro de la animación. Además, el personal es muy amable y el ambiente es muy agradable.
Situado en Damrak, una de las calles principales del centro de la ciudad que une la estación con la famosa plaza Dam, el Amsterdam de Roode Leeuw está ubicado en un lugar ideal para descubrir la ciudad, sus museos, sus comercios y su ambiente.
Dispone de 79 habitaciones de las cuales únicamente quedan 30 son para no fumadores, aunque pronto lo serán todas debido a la nueva ley antitabaco que entra en vigor en 2008. La decoración es clásica aunque están equipadas con los servicios más modernos, con televisión de pantalla plana y dos teléfonos. Todas las habitaciones son de diferente tamaño, aunque todas ellas son lo suficientemente grandes para acoger una cama doble y un escritorio. Los pequeños cuartos de baño tienen, en su mayoría, duchas. Están un poco anticuados, aunque deberían ser renovados a principios de 2008. Algo más práctico para los que se alojen durante un tiempo es la ropa de cama. Además, para los más golosos, disponen de algunos pastelitos a modo de aperitivo y pequeñas botellas de agua.
Construido en 1911, este gran edificio destaca principalmente gracias a su restaurante, que ocupa toda la planta baja. La entrada del hotel, apenas significativa, se abre a una recepción situada en un pequeño vestíbulo de entrada. En los cuatro pisos del hotel se reparten las habitaciones de todos los tamaños.
Cuenta con una excelente cervecería antigua, con decoración en rojo y madera, que tiene mucha clase. Cada plato cuesta entre 10 y 15 euros. Puedes optar por la fórmula económica que incluye el desayuno, el almuerzo y la cena por 32 euros y poder así tener el placer de saborear una excelente cocina tradicional en un marco típico y acogedor.
Aunque existe desde el año 1911, el hotel sigue siendo independiente y no pertenece a ninguna cadena.
masaje, salón de belleza, EPA, baño turco
golf
Elsa D.
Excellent hôtel,chambre confortables et surtout très propres. repas et menus correct
bien, belle chambre..............
sympa.................
Marlene R.
Bon hotel, très bien placé, en plein centre ville,commerces juste au pied de l'hotel (resto, fast-food, supermarché, transports en commun.
Tous sur place.
Aucun.
Christian F.
accueil un peu froid , chambre attribuée inférieure à la réservation ,prestations correctes ,restauration de bon gout
situation plein centre bonne insonorisation décoration design restauration de qualité avec un bon service
accueil impersonnel et peu chaleureux
Gwenola H.
Visité 2 fois une première fois parfaite avec un service génial et un service digne des étoiles. La seconde les chambres étaient mal situées, bruyantes et moins bien aménagées. Il faut vraiment préciser à la réservation d'avoir une chambre sur la rue
Proche de la gare Restaurant d'hôtel
certaines parties de l'hôtel son vraiement bruyantes
Alexis D.
Hotel tres bien j'y retournerai
Pas cher accesible facilement
pas tres grand pas moderne
Benini C.
Difficile trovare ad Amsterdam un albergo in posizione più centrale di questo. Ovviamente, però, il costo è proporzionale al luogo!
Posizione centrale (anzi, centralissima), camere spaziose, ottima accoglienza da parte del personale.
Ristorante non proprio per tutte le tasche.
Situado en una zona central de la ciudad en un edificio antiguo, el Avenue es un hotel sencillo, sin pretensiones pero cómodo y bien adaptado a las familias con su oferta de habitaciones triples y cuádruples.
Entre los hoteles cómodos de Ámsterdam, esta antigua destilería convertida en hotel está idealmente ubicado para descubrir la ciudad, sus bares, restaurantes y museos. El Tulip Inn destaca por la cálida atención que se brinda a sus clientes. Pronto te sentirás como en casa.
Este gran hotel situado en pleno centro de Ámsterdam tiene el encanto de los pequeños hoteles. Es perfecto para los turistas no muy exigentes con las habitaciones pero sí con el emplazamiento y la animación cercana. Ambiente cordial y acogedor.
Sofitel the Grand es uno de los mejores hoteles de Amsterdam, si no el mejor. Un lugar de encuentro para los famosos que están de paso por esta ciudad excéntrica. Lujo, comodidad, gastronomía y encanto se dan cita en un edificio del siglo XIV en pleno centro de Amsterdam. Solo nos queda inclinarnos y aplaudir.
Sin pretensiones, el hotel Nova tiene una ubicación privilegiada en el centro de la ciudad además de ser limpio y decorado en forma sencilla. Conveniente para familias o amigos que quieran albergarse en la misma habitación.
Situado en uno de los sitios más céntricos de la ciudad, el Swissotel tiene habitaciones confortables y la ventaja de proponer un gimnasio. Resulta ideal para estancias cortas y las personas que quieran recorrer Ámsterdam caminando.
El Tulip Inn Amsterdam Center propone habitaciones de calidad muy desigual, por lo cual vale la pena preguntar antes de reservar. El decorado moderno de las habitaciones deluxe tiene su encanto así como las partes comunes.
Tradicional hotel de categoría amsterdamés, el Krasnapolsky seduce con su jardín de invierno, sus amplios salones y su restaurante francés. Sin embargo, algunos sitios, y en especial habitaciones, merecerían una gran renovación.
Sofitel the Grand es uno de los mejores hoteles de Amsterdam, si no el mejor. Un lugar de encuentro para los famosos que están de paso por esta ciudad excéntrica. Lujo, comodidad, gastronomía y encanto se dan cita en un edificio del siglo XIV en pleno centro de Amsterdam. Solo nos queda inclinarnos y aplaudir.
Modernidad, lujo y confort son quizás las palabras que mejoren definen al Movenpick de Ámsterdam. Hotel concebido para los viajeros de negocio también seducirá a los amantes de las vistas panorámicas.
Compuesto por 25 casas antiguas, el Pulitzer es un hotel atípico de arquitectura propia de Amsterdam. Lujoso y con encanto, recibe a sus clientes con toda sencillez en un marco auténtico.
He aquí un hotel con encanto que aplica un concepto bastante original en Ámsterdam: el "todo incluido" o "all inclusive". En un ambiente acogedor, uno se sentirá como en casa. Además, el hotel está situado en pleno corazón de Ámsterdam. Revistas, bebidas, aperitivos, películas, Internet, todo es gratuito, o está incluido, todo depende del punto de vista de cada uno.
Con su capilla-sala de conferencias del siglo 15 y sus variadas habitaciones, impregnadas del ambiente del Ámsterdam tradicional, en especial las Deluxe, el Barbizon Palace seduce. Además combina historia y modernidad en sus infraestructuras.
Confort, servicios y lujo a la americana. Esta es la propuesta del Ámsterdam Marriot. Aquí destacan las infraestructuras, en especial el gimnasio y el tamaño de las habitaciones. Ideal para huéspedes exigentes amantes de una decoración americana neoclásica.
Sorprendente ejemplo de la arquitectura Art Nouveau, el American hotel merece el rodeo por su fachada, su esplendido Café y su decoración. Además ofrece los servicios de un hotel de categoría (conserje) en pleno centro de Ámsterdam. Ideal para una estancia romántica y sobre todo para los amantes del estilo Art nouveau.
Se realizaron reformas a finales de 2007 en este hermoso hotel, lo que le permitio poder llevar con orgullo sus 4 estrellas. Mientras tanto, puede presumir de su encantadora fachada, su emplazamiento de ensueño y su servicio intachable.