Gonzalo González Beneytez
Jefe de sección
El Royal Palissandre ofrece un entorno acogedor y una decoración llena de encanto. El personal es muy alegre. Este hotel es un auténtico placer, nuestro favorito en Antananarivo.
Royal Palissandre - © EASYVOYAGE
Royal Palissandre - © EASYVOYAGE
El Royal Palissandre se encuentra en la calle Andriantahifotsy, en Antananarivo. No está bien situado, sobre una colina. Para llegar al centro de la ciudad hace falta bajar una escalera.
El hotel cuenta con 46 habitaciones, de las cuales seis son de lujo, dos de ellas triples, 10 con dos camas, y el resto con una cama king size (extra grande). Hay cuatro habitaciones comunicantes. Las habitaciones son muy agradables, amplias, con una superficie de 30 m², y están decoradas con buen gusto, todo en palisandro. Disponen de televisión por satélite (12 canales), aire acondicionado, minibar completo, caja fuerte y teléfono directo para conferencias internacionales. Las habitaciones tienen vistas a la calle o a la parte baja de la ciudad de Antananarivo. Los cuartos de baño están equipados con bañera. Los servicios están aparte. El servicio de habitaciones funciona las 24 horas del día.
Construido en 1997, el Royal Palissandre consta de dos edificios en ladrillo rojo de Mantasoa, de tres plantas con ascensor. Dispone de una bella recepción. La decoración está en su mayor parte realizada en palisandro. Entre el bar y el restaurante, encontramos un piano. El hotel dispone de una sala de fitness muy agradable, con las paredes pintadas con un color azul a la antigua y el suelo en junco marítimo, con espejos, y la música siempre sonando. Gracias a una pequeña escalera, también en palisandro, accedemos a las salas de masaje. También podemos dirigirnos al baño turco, la piscina, o el solárium, de madera, algo pequeño, y equipado con tumbonas.
El restaurante, con una capacidad para 70 comensales, es amplio, y dispone de terraza. Es acogedor, embellecido con palisandro y pinturas malgaches. Los colores son cálidos, y la decoración elegante: salvamanteles de mimbre, flores, mesas de madera con cristal... Las comidas se sirven en mesa, menos el desayuno, que consiste en un bufé. La cocina es internacional. Podemos degustar una gran variedad de carnes y pescados: braseado de verduras, lengua con arroz rojo y rougail (condimento típico ligeramente picante), romaxava (cerdo y cebú) real, y bredemafan (verduras)... El bar, muy atractivo, ofrece una variedad de ron aderezado. Da al pequeño jardín.
El Royal Palissandre no está bien situado. El Royal Palissandre acepta euros y algunas tarjetas de crédito.
hammam, EPA
gimnasia
Anonyme.
un rêve calme et reposant et un restaurant de qualité, de la gastronomie malgache moderne et savoureuse
belle terasse, spa, piscine, restaurant avec thèmes, bonne literie, pressing
petite rue pas facile d'accès
Anonyme.
Très bel hôtel, qui met en avant l'esprit malgache dans son infrastructure. Service de qualité, avec un restaurant possédant une vue panoramique sur la capitale. Très bien situé au centre-ville
- Le Restaurant surplombe la ville d'Antananarivo offrant une superbe vue - Cuisine excellente - Service de qualité - Chambre très bien entretenue
- Chambre simple un peu "vieillotte" dans le style
En pleno corazón de Antananarivo, el Sakamanga ("gato negro" en malgache) pertenece a la categoría de los hoteles con alma propia. Es uno de los hoteles más agradables de Antananarivo, un auténtico lugar de encuentro. Intimista, es muy valorado por su bar-restaurante acogedor, en el que se respira un ambiente maravilloso.
Situada en Antananarivo, la residencia Lapasoa es una casa tradicional malgache, lugar de encuentro, célebre por su restaurante, el Kudéta, en el que se come muy bien.
Con aire clásico, el Colbert es un buen hotel a la altura de los que buscan un alojamiento con el máximo confort.
En el corazón de Antananarivo, el Tana Plaza ofrece un servicio adecuado. En él encontrarás la comodidad que necesitas durante tu aventura en la Gran Isla Roja.
El Hilton Plaza de Antananarivo, una cadena de calidad, es bastante agradable, con una decoración de carácter que ha sabido utilizar los materiales malgaches.
Con aire clásico, el Colbert es un buen hotel a la altura de los que buscan un alojamiento con el máximo confort.
Situada en Antananarivo, la residencia Lapasoa es una casa tradicional malgache, lugar de encuentro, célebre por su restaurante, el Kudéta, en el que se come muy bien.
En pleno corazón de Antananarivo, el Sakamanga ("gato negro" en malgache) pertenece a la categoría de los hoteles con alma propia. Es uno de los hoteles más agradables de Antananarivo, un auténtico lugar de encuentro. Intimista, es muy valorado por su bar-restaurante acogedor, en el que se respira un ambiente maravilloso.
En el corazón de Antananarivo, el Tana Plaza ofrece un servicio adecuado. En él encontrarás la comodidad que necesitas durante tu aventura en la Gran Isla Roja.
El Hilton Plaza de Antananarivo, una cadena de calidad, es bastante agradable, con una decoración de carácter que ha sabido utilizar los materiales malgaches.