Las habitaciones del Club Portinatx, decoradas según el estilo local de hostelería moderna, es decir, paredes blancas con algunos grabados y mobiliario de pino, son muy funcionales. Disponen de televisión por satélite, caja fuerte, aire acondicionado, balcón de tamaño medio y teléfono directo. La mitad de las habitaciones cuenta con cuarto de baño con bañera. Las restantes están equipadas sólo con duchas.

El Club Portinatx se compone de un edificio principal rodeado por varios bloques, que se reparten en varias terrazas sobre un gran jardín bien cuidado. Con una capacidad para 500 personas, tiene 243 habitaciones y bungalows, a los que se accede desde el mismo nivel. En el centro, los clientes disponen de una bella piscina lago con tumbonas y unas vistas impresionantes sobre la cala.

La gran sala del restaurante, situada en la primera planta, propone un bufé internacional cuyo menú se ve fuertemente influenciado por los gustos de los clientes alemanes. Como suele suceder en Ibiza, el nivel de higiene es excelente. El cocinero propone todos los miércoles una cena de gala, inspirada en la cocina española. Destacamos: las bebidas a voluntad gracias a la fórmula "todo incluido", incluso en los bares del salón y la piscina.

Se accede a la bella cala del hotel por una escalera. Al final de los escalones, se encuentra la recompensa que toma forma en una pequeña playa de arena fina bañada por agua transparente. Además, se pueden practicar diferentes actividades: canoa, windsurf, submarinismo, esquí acuático.

El 50% de los clientes del Club Portinatx, construido en 1981 y remodelado cada año, procede de Alemania. Este establecimiento disfruta de un entorno maravilloso, entre pinares y sobre una bella cala. Las zonas comunes están climatizadas y el club infantil recibe a los niños de 5 a 12 años durante la temporada alta. Abre de abril a noviembre.