La entrada del hotel podría ser más elegante, da a un aparcamiento. Una vez dentro, enseguida nos cautiva una atmósfera elegante y distinguida realzada por el suelo de mármol, pesadas cortinas, tapicería y plantas dispuestas por todos lados. Pasamos de un pasillo y un salón a otro, una escalera sube a planta hasta la parte de bienestar. Un bonito espacio de aspecto japonés reúne la sala de masaje, la sala de fitness muy bien equipada y luminosa. Si el Vitalis es el centro de bienestar en Eilat se debe a su spa abierto de 8:00 a 20:00 h, pero también a sus numerosas instalaciones acuáticas. Una piscina interior con una parte exterior bordea el solárium, cascadas de efectos terapéuticos - una caliente y otra fría - están acondicionadas al lado del jacuzzi. Recuerda que los clientes del hotel tienen bicicletas gratuitas a su disposición.