Las 16 villas de 186 m² de Fregate, están situadas frente al mar, en un magnífico bosque de cocoteros. Diseñadas con materiales naturales, especialmente madera esculpida pero también con sederías tailandesas y algodones egipcios, se componen de dos partes distintas: por un lado, una habitación con terraza y cuarto de baño, por el otro, un salón y entre los dos, una inmensa terraza de madera roja que domina todo el mar. Amuebladas con sobriedad y refinamiento, en un estilo étnico elegante, te ofrecen las mejores comodidades: TV satélite con lector CD/DVD, climatización individual y ventilador, teléfono directo con conexiones para fax y ordenador, minibar, caja fuerte... Para nada te vas a sentir en un universo frío parecido al de los hoteles grandes, aquí hasta los lagartos forman parte del decorado. Cada villa dispone también de dos duchas y de un jacuzzi exteriores con un bohío acondicionado para la siesta.

Inaugurada en 1998, esta isla-hotel, de 2 km de largo y apenas un kilómetro de ancho, se parece a un auténtico pueblecito con su puerto deportivo, su helipuerto, sus pequeñas carreteras y sus 16 lujosas villas en la ladera de una colina. La recepción, anidada en un edificio de estilo balinés y el personal agradable, te recuerdan que te encuentras en un hotel con diferentes servicios en juego: biblioteca, restaurante, tienda de recuerdos, sala de fitness... Decoración para los amantes de un ambiente zen: antigüedades importadas especialmente de Asia, telas en las paredes y madera por todas partes. Piscina a pie de playa entre una abundante vegetación y rocas típicas de las Seychelles y también un pequeño chiringuito. Hay un segundo restaurante cerca del puerto deportivo, en la "Plantation House". Excepto algunas pistas de tenis, casi todas las actividades que se organizan están relacionadas con el mar: submarinismo, pesca de altura, catamarán... sin olvidar las ocho playas privadas de la isla. Y para disfrutar con toda tranquilidad de este pequeño paraíso terrestre sin cansarte demasiado, el hotel pone a tu disposición cochecitos de golf.

Para las comidas, puedes elegir entre dos restaurantes de ambientes diferentes. El restaurante principal Fregate House que domina todo el mar, te ofrece un desayuno tipo bufé. El almuerzo y la cena, de cocina internacional refinada, se sirven "a la carta." Construido en una antigua plantación, cerca del puerto deportivo, el segundo restaurante, el Plantation House, te permite disfrutar durante el día de una gran variedad de platos exóticos de la cocina criolla e india y de parrilladas preparadas bajo demanda. Dispone de una carta de vinos de muy buena calidad para tratarse de las Seychelles pero también se nota en los precios... Si lo deseas puedes también disfrutar de la intimidad de tu villa llamando al servicio de habitaciones disponible las 24 horas. El hotel tiene dos bares de los cuales uno está en la playa.

Con nada menos que ocho playas, de las cuales la magnífica Anse Victorin, es fácil sentirse sólo en el mundo en Fregate. Arena fina, aguas color turquesa, rocas de redondeces armoniosas y cocoteros forman parte de este entorno natural, discretamente acondicionado para las necesidades de una clientela de alta categoría. Se instalan tumbonas y sombrillas a petición, las toallas y bebidas frías están a tu disposición permanentemente y algunas hamacas bajo la sombra te invitan al descanso. Si eres deportista puedes disfrutar del club de vela o de submarinismo e ir en barco durante una jornada de pesca de altura.

Fregate Island es una isla privada de 3 km² reservada a unos pocos privilegiados, entre los que se encuentran numerosas personalidades de la jet set. Los precios para estancias de mínimo cinco noches son especialmente elevados. El hotel garantiza una calidad indiscutible, un servicio fuera de serie y una gran discreción. Fregate contiene también una fauna y una flora extraordinaria con especies endémicas como la cotorra de las Seychelles. Para ayudar a descubrir estas riquezas a sus huéspedes, el hotel alquila una vez a la semana los servicios de un guía botánico para recorrer uno de los 10 senderos de la isla. Una oportunidad para admirar los raros pájaros, los árboles y plantas endémicas y otras tortugas gigantes

Consejo para el alojamiento

Las dos villas familiares están anidadas en un jardín tropical privado,  especialmente recomendado para familias con niños pequeños. Las otras 14 villas, situadas en la cima de los acantilados, ofrecen una vista panorámica insólita sobre el Océano Índico.