El restaurante principal está abierto para el desayuno y la cena. Las comidas se sirven en forma de abundantes bufés. Por la mañana puedes elaborar un generoso plato a base de embutidos, queso, frutas frescas o en almíbar, huevos revueltos, salchichas, panecillos y cereales. Por la noche, los platos propuestos son de inspiración local o internacional. Es una buena oportunidad para probar el pez espada al plátano, el atún con tomate o el cordero con especias. La sala da a los jardines y es amplia y luminosa. Está equipada con mesas con elegantes manteles blancos y sillas de madera clara, y ofrece un marco refinado y un servicio muy atento. En el restaurante Barbecue, situado junto a la piscina más pequeña, puedes saborear pescados a la plancha o sabrosas carnes en un entorno muy distendido. Hay otros tres restaurantes a la carta que están igualmente abiertos por la noche y en los que puedes disfrutar de cocina portuguesa, mediterránea y pizzas respectivamente. En cuanto a las tarifas, calcula unos 28 euros por un menú.