Gonzalo González Beneytez
Jefe de sección
Este pequeño hotel familiar se esmera al máximo para que sus clientes disfruten del mayor número de actividades y animaciones. A veces en detrimento de la calidad o más bien del espacio.
Menara Hammamet - © Carlos Rodrigues / EASYVOYAGE
Menara Hammamet - © Carlos Rodrigues / EASYVOYAGE
En la zona hotelera sur de Hammamet, a 7 km del centro de la ciudad. Para trasladarte del aeropuerto de Túnez (situado a 65 km) al hotel tardarás 55 minutos.
Grandes pasillos en tonos verde claro y blanco conducen a 129 habitaciones, 60 de ellas triples y 60 dobles. No todas las habitaciones tienen televisión, así que no te olvides de preguntarlo antes para no llevarte una sorpresa desagradable. La decoración no es nada del otro mundo, pero es aceptable.
Por fuera, el hotel blanco de formas redondeadas, es típicamente tunecino. Dentro, el hall de entrada un poco kitsch con una fuente y una lámpara de araña, no es muy acogedor pero el personal te atiende con una sonrisa. Desde esta pequeña entrada se accede, a la izquierda, al restaurante buffet y a la derecha, al bar, y siguiendo todo recto a la piscina exterior rodeada de cerca por los edificios de las habitaciones.
El café Maure, que domina la piscina, es un lugar agradable para fumar el narguile con calma.
En este hotel, preocupado por ofrecer numerosas actividades a sus clientes, los responsables parecen no darse cuenta de que el espacio es reducido. El salón de belleza y la sala de fitness son realmente pequeños, pero al menos se agradece su existencia. El director está orgulloso de la discoteca situada en el subsuelo. Participantes de la edición francesa de Operación Triunfo (Star Academy) de 2006 han actuado en esta sala redonda con sillones rojos.
La restauración es de lo más normal: un buffet clásico y un chiringuito en la piscina. Sin embargo, en marzo de 2007, cuando visitamos el hotel, acababan de terminar un restaurante a la carta justo delante de la piscina. En éste se puede comer pescado o carne cocinados a la barbacoa delante de los clientes, en una decoración de ladrillo con recámara.
Los jueves se sirve una cena tunecina en el buffet, seguida de una velada oriental.
Aquí, los horarios de las comidas se adaptan a las entradas y salidas de los veraneantes. Si tu avión sale a las 5:00 de la madrugada, te servirán un desayuno básico antes de marcharte. El cliente es lo primero. No hay motivo de preocupación para los que se quedan, ya que también se servirá el desayuno en los horarios habituales.
La playa está bien acondicionada, aunque un poco alejada del hotel. El caminito que lleva a la playa es muy agradable pero hay que cruzar las actividades del hotel Nesrine y caminar un poco sobre la arena antes de poder instalarse en las tumbonas gratuitas del hotel, igual que las sombrillas. Es un trayecto de 5 minutos a pie. Y no te engañes instalándote en la playa más cercana al hotel, ya que es de pago.
Los aficionados a la petanca encontrarán compañeros de juego. En el terreno de bolos, situado detrás del edificio donde se encuentra la piscina cubierta, siempre hay animación.
masaje, salón de belleza, sauna, hammam, puesta en forma, EPA, baño turco, wellness
tenis, gimnasia, aquagim, aerobic, Voley playa, golf, Kayak, patinete, baile, water-polo, fitness
Anonyme.
Hotel pas idéal pour des vacances en famille car il n'y a pas d'animations si on le demande pas aux animateurs.. L'eau est payante à table malgrès que j'étais en demi pension. Mais il est idéalement situé par rapport à la ville et c'est un hôtel très reposant avec une bonne hygiène !
Coffre fort à code dans la chambre
pas d'animations, eau payante lors des repas
Anonyme.
agréable très charmant hôtel, pleins de vie
propre. belle piscine.chambre grande et jolie munie d'un balcon. très fleuri on s'y s'en bien. 300 mètre de la plage
rien peut être les repas mais ça reste correcte.manque le goûter l'après midi. celui ci est payant.
Anonyme.
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Anonyme.
Très beau hôtel entièrement rénové notre chambre nous donner la vue sur la piscine très bonne ambiance et familiale.
Animations excellente, très belle chambre avec vue sur piscine
Le personnel parfois désagréable, quelques vices cachées
Anonyme.
Calme, accueillant, j'ai apprécié le confort.
Tranquillité, joliment décoré. Et personnel à l'écoute
Petit déjeuner : la diversité des choix manquait.
Anonyme.
j'ai passé un superbe séjour le service de qualité les chambres impeccable rien à redire superbe ne regrette pas
vu sur la mer hotel calme
n'en trouve pas !!!! je n'ais eu aucun soucis dans cet hotel
Anonyme.
j'ai passé un superbe séjour le service de qualité les chambres impeccable rien à redire superbe ne regrette pas
vu sur la mer hotel calme
n'en trouve pas !!!! je n'ais eu aucun soucis dans cet hotel
Anonyme.
hotel sympa propre super ambiance les animateur au top bonne rigolade et voyage inoubliables .
personnel au petit soin tous tres gentilles hotel propre et animateur bien sympa
les repas pas tres bon buffet leger
Sencillo, cálido y bien ubicado, el Club Vénus cumple perfectamente con las expectativas, dentro de su categoría. Dispone de instalaciones variadas que gustarán especialmente a familias. Pero los jóvenes tampoco se aburrirán, gracias a las animaciones.
El Eldorador Salammbô es un buen lugar para alojarse, tanto por su amplia playa como por sus infraestructuras deportivas. Se trata de un valor seguro en el centro de la zona turística de Hammamet. Es ideal para venir a pasar una estancia en un entorno sencillo pero bien cuidado en el que se propone toda una gama de actividades. Y la guinda en el pastel es que el establecimiento acaba de abrir un spa muy mono.
De exótico, el Bahia Beach sólo tiene el nombre. El hotel está lejos de parecerse a una posada brasileña, ¡y la playa queda a más de 150 metros! Sin embargo, aunque el establecimiento no ofrezca nada demasiado original, las infraestructuras de recreo y las actividades que organizan te permitirán pasar una estancia agradable entre amigos o con la familia.
Se trata de un moderno y lujoso hotel que tiene todos los ingredientes de un buen cuatro estrellas en la costa tunecina: el ambiente es grato, las instalaciones son nuevas (de 2007) y ofrece los servicios y medios necesarios para pasar unos días de descanso combinado con actividades lúdico-deportivas.
Abierto en 1995, el Bel Air ofrece unas prestaciones desiguales. Si bien la recepción y las habitaciones muestran su mejor cara, no podemos decir lo mismo de las infraestructuras repartidas en un parque minúsculo. Prueba de ello son las tumbonas dispuestas bastante juntas entre sí, alrededor de la piscina. Para disfrutar de un poco de intimidad, mejor que te acerques a la playa... si tienes ganas de recorrer los 500 metros que la separan del hotel.
Construido en 1968, el Samira Club por su antigüedad cuenta con el privilegio de estar construido junto al agua. Es difícil adivinar la edad real del establecimiento, tanto la recepción como las zonas comunes dan la impresión de haber sido construidas hace poco. Sin embargo, no ocurre lo mismo con las habitaciones, que tienen una decoración y unas prestaciones decepcionantes. Por tanto, debes aprovechar para pasar el día fuera y realizar las muchas actividades que ofrece el lugar.
Un clásico de la hostelería tunecina aconsejado para las familias que deseen pasar unas vacaciones en la playa sin arruinarse.
Construido en 1967, el Caribbean World Hammamet Beach es uno de los hoteles más antiguos de la zona sur de la ciudad. A pesar de su edad, el hotel club ha sabido renovarse y en la actualidad ofrece un aspecto moderno y múltiples actividades a sus 900 clientes. Una lograda transformación para este antiguo palacio junto a la orilla del mar.
El Sindbad, ideal para parejas, es uno de los hoteles más atractivos de Hammamet. En este establecimiento situado en una preciosa ciudad costera, están asegurados la tranquilidad, la comodidad y el saber vivir.
El Dar Hayet, pequeño, intimista y refinado, es el lugar perfecto si queremos alojarnos en un sitio típicamente tunecino. Un trato muy atento y discreto está garantizado en este agradable establecimiento que se funde en un paisaje rodeado de casas privadas, en el corazón del golfo de Hammamet.
El Radisson Blu Resort & Thalasso Hammamet es un magnífico establecimiento de alta gama que alberga un increíble centro de talasoterapia. Este hotel, envuelto en una atmósfera oriental a la par que de diseño, se encuentra a los pies de una hermosa playa de 3 km al norte de la medina de Hammamet. Está abierto durante todo el año y es ideal para parejas, familias y amantes del bienestar en general. La gastronomía y el confort de las habitaciones merecen una mención especial.
El hotel Méhari Hammamet es un moderno establecimiento de estilo marroquí, de imponente fachada y decoración árabe, de ambiente familiar, pero que no responde con exactitud a las cinco estrellas que califican su categoría.
No son muy frecuentes los 5 estrellas en el destino turístico de Hammamet. El Riu Palace Marhaba abrió sus puertas en el 2009 y se instaló en el recinto del antiguo Sheraton. Pero pese a su estatus de hotel de lujo, el Riu Palace no se ha olvidado de las animaciones (aunque son más ligeras) ni del régimen de todo incluido, y hasta cuenta con un club infantil y terrenos deportivos. El establecimiento está bien cuidado y las habitaciones son lujosas, pero propone su propia versión del palacio, entre club de vacaciones y hotel urbano.
El Nahrawess se distingue de sus vecinos por sus infraestructuras especialmente variadas: dispone de un centro de talasoterapia muy completo. Dotado de una animación discreta, resulta ideal para aquellos que quieren descansar sin aburrirse.
El Club Med Hammamet, situado frente al mar, dispone de una arquitectura típica y se extiende en un amplio espacio donde encontramos todas las infraestructuras deseadas, incluso más. Sus variadas actividades de ocio y su animación ininterrumpida lo convierten en el lugar ideal para los partidarios de vacaciones activas. También es el lugar de ensueño para los padres que quieren delegar con toda tranquilidad en el personal del hotel las actividades de sus hijos.
Ideal para unas vacaciones en familia o entre amigos, el club Olé Nozha Beach es un hotel simple, pero bien distribuido. Su entorno es placentero y el ambiente festivo.