El hotel, construido hace cuatro años, mezcla un estilo moderno con motivos de la región de Mandore. Cuenta además con diferentes infraestructuras para descansar y relajarse tras un día de visitas: una magnífica piscina, una de las más grandes de Jodhpur, un enorme centro de fitness y un agradable spa, si bien no resulta excepcional en cuanto a su decoración. También se ha pensado en los más pequeños con la construcción de un columpio y un tobogán. Y para todos, una gran sala de actividades con televisión, películas, juegos, billar, música, ping-pong, bicicletas, patinetes e incluso un "punching-ball".
Para matar el apetito, una panadería vende todo tipo de pasteles.