


El Royal Meridien Baan Taling Ngam, situado en la costa oeste de Samui y completamente alejado de las multitudes, destaca en un magnífico entorno. Tan oneroso como fascinante.
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- Bien situado
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El Royal Meridien Baan Taling Ngam, situado en la costa oeste de Samui y completamente alejado de las multitudes, destaca en un magnífico entorno. Tan oneroso como fascinante.
A orillas de la playa de Taling Ngam, en la costa oeste de Koh Samui. Nathon, la principal ciudad de la isla, está a 12 kilómetros dirección norte (unos 15 minutos por carretera) y el aeropuerto, al otro lado de Samui en la costa este, se encuentra a unos 35 kilómetros, es decir, un trayecto de más de 50 minutos.
Las 70 habitaciones del Royal Meridien están repartidas en tres categorías: Deluxe (40), suites (7 suites playa y 2 suites de lujo) y chalés (23 en total con una, dos o tres habitaciones), que son prácticamente casas completas, con cocina incluida. El lujo está asegurado, sea cual sea la elección: muy espaciosas (más de 30 m²), orientadas al mar y amuebladas con mucho gusto en un estilo tailandés a base de madera y materiales naturales; las habitaciones son extremadamente cómodas y está equipadas con todo lo necesario, incluso con una cadena Hi-Fi y un lector de DVD. Cada mañana se desliza el periódico del día en todas las habitaciones. Cabe destacar la agradable terraza de las habitaciones Deluxe, y los baños, completamente revestidos con un sobrio embaldosado negro que causa un elegante efecto.
El magnífico Royal Meridien, construido en 1994, está situado en una zona prácticamente aislada, ocupando una colina entera; alrededor de ésta, el Golfo de Tailandia, todo en un enclave natural ampliamente preservado. El edificio principal está construido en la cima de la atalaya, con unas extraordinarias vistas panorámicas al mar y a la región de alrededor. Está formado por un cómodo y amplio vestíbulo, un buen número de instalaciones y servicios comunes (tiendas, piscina, sala de fitness, bar, etc.), así como todas las habitaciones de lujo. En el resto del complejo podemos encontrar chalés privados agradablemente dispersados entre la vegetación (algunos ubicados en escalones de manera sucesiva en la ladera de la colina y otros en la parte baja junto a la playa), así como otros espacios comunes como piscinas, bares, restaurantes e instalaciones deportivas. Un magnífico spa, construido en 2003, ofrece una gran variedad de masajes y cuidados en una de las seis habitaciones de tratamiento.
Los clientes del hotel pueden elegir entre tres restaurantes, cada uno de ellos situado en uno de los subconjuntos del complejo (en la cima de la atalaya junto al vestíbulo, en la ladera de la colina y en la parte de abajo junto a la playa). El marco está muy cuidado y la carta es temática: puedes elegir cocina tailandesa en el Baan Chantra, mediterránea en el Lom Talay y marisco en el Promenade. El nivel de la gastronomía cumple con los mismos estándares que el resto del hotel, es decir, gama alta, y la carta de vinos resulta muy interesante. Además, se organizan tres cenas temáticas diferentes cada semana. Sus precios mantienen la tónica del hotel: generalmente, más del doble que los del resto de hoteles.
Quizás el único inconveniente del Royal Meridien sea su playa: algo decepcionante respecto al nivel general del hotel. La línea de playa, de dimensiones medianas y con árboles plantados de una manera coqueta, resulta agradable a la vista, pero la presencia de numerosas rocas complica la labor a los bañistas, incluso si la calidad del agua es irreprochable y el desnivel de la playa correcto. Afortunadamente, esta parte del litoral de Koh Samui, frente al Golfo de Tailandia, está muy bien preservado de las multitudes de turistas que abarrotan otros lugares y es, por tanto, un lugar propicio para el descanso. La tranquilidad está garantizada.
Los buggy eléctricos aseguran, gratuitamente y durante todo el día, el transporte de los clientes desde el hotel al interior del lugar.
El hotel ha sido obsequiado con dos premios de viaje en 2005 y su spa, construido en 2003 (seis salas de tratamiento) ha sido considerado como un Leading Spa (2005-2006).
masaje, salón de belleza, sauna, EPA
tenis, esquí náutico, gimnasia, Voley playa, golf, btt, vela, Kayak, canoa, baile, water-polo, deportes
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belle vueddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddd
suite un peut petit avec ddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddddd
El hotel Napasai ofrece una comodidad irreprochable en un marco de ensueño. Las parejas en busca de tranquilidad estarán encantadas en este enclave en la otra punta del mundo.
El Zazen Bungalows es un pequeño hotel con encanto "con los pies en remojo". El hotel disfruta de un bonito marco, un confort innegable en un ambiente agradable y relajado.
El Samui Palm Beach Resort es un complejo de gran tamaño situado junto al mar. Garantiza comodidad en un marco bastante clásico.
The Rummana Boutique Resort, abierto en diciembre de 2006, está instalado en la tranquilidad, en un extremo de la playa de Lamai. Dicho sea de paso, se encuentra cerca del famoso "Grandfather and Grandmother Rocks" o "Hin Ta Hin Yai" en tailandés. El lugar es agradable, ideal para quienes buscan descanso.
He aquí un hotel en el que disfrutar de unas fantásticas vacaciones. El Pavilion Samui es un pequeño hotel que bordea la playa de Lamai Beach. Los clientes son bastante jóvenes. La arquitectura tailandesa del hotel es todo un éxito, por no hablar de la comodidad de las habitaciones. Anótate este sitio en tu agenda secreta.
Abierto desde el 1 de febrero de 2007, el Four Seasons Koh Samui está a la altura de la reputación de la cadena hotelera del mismo nombre. Aislado en lo alto de una colina, el establecimiento está alejado de la civilización. El entorno es magnífico y las vistas al Golfo de Tailandia increíbles. Delicadeza y elegancia son las palabras que definen el lugar. ¡Un lugar para deleitarse!
El Nora Beach es un complejo tailandés donde te resultará difícil pensar que estás en otro país. Su decoración, compuesta por elementos representativos de Tailandia, constituye su principal ventaja. Entre el pabellón de estilo lanna que acoge a la clientela, del que hay que admirar la poesía arquitectónica, y el jardín con sus plantas tropicales donde se ubican los bungalows, el Nora Beach ha sabido sacar el mejor partido a sus atractivos al tiempo que permanece en una categoría intermedia. Concebido principalmente para las parejas más que para las familias (debido a la ausencia de instalaciones para niños), el complejo se encuentra en la parte norte de Chaweng, mucho más tranquila y menos frecuentada que el centro de Chaweng Beach.
Cuando entras en la recepción del X2 Resort, tienes la impresión de encontrarte en un sitio de otro mundo. La recepción es una estructura abierta de diseño en la que predomina la madera, con suelo de cemento y que deja de lado la arquitectura tailandesa. El resultado general no es nada desagradable. Con sus líneas depuradas y modernas y su amplio espacio, el X2 Resort no pasa desapercibido. El hotel se inauguró en 2008 aunque el salitre ya ha empezado a corroer algunas zonas. Y eso se nota.
Abierto desde el 1 de febrero de 2007, el Four Seasons Koh Samui está a la altura de la reputación de la cadena hotelera del mismo nombre. Aislado en lo alto de una colina, el establecimiento está alejado de la civilización. El entorno es magnífico y las vistas al Golfo de Tailandia increíbles. Delicadeza y elegancia son las palabras que definen el lugar. ¡Un lugar para deleitarse!
El Zazen Bungalows es un pequeño hotel con encanto "con los pies en remojo". El hotel disfruta de un bonito marco, un confort innegable en un ambiente agradable y relajado.
El Santiburi Dusit Resort, situado al norte de Koh Samui, extiende sus instalaciones de gama alta a orillas de la bonita playa de Maenam: aquí, todo es lujo, tranquilidad y voluptuosidad.
Se trata de un hotel de gama alta situado en Chaweng Beach: una de las playas más frecuentadas de Samui. La hostelería sofisticada del Central Samui Beach Resort, además de sus completas instalaciones, permiten (o casi) que uno se olvide de las multitudes de la zona.
El hotel Napasai ofrece una comodidad irreprochable en un marco de ensueño. Las parejas en busca de tranquilidad estarán encantadas en este enclave en la otra punta del mundo.
El panel de la entrada ya da una pista: en el cartel está escrito "Miembro del grupo Design Hotels". En pleno Berlín o en los barrios de moda de Londres, ni te darías cuenta de que está. Pero cuando lo lees con chancletas en los pies, una bolsa de colores colgada de la espalda y estás en medio de la animación tailandesa, entre Chaweng Beach y Koh Samui, estas palabras toman otra dimensión. Para empezar porque el diseño está poco presente en esta región, que se distingue sobre todo por su estilo oriental-zen, y menos en los hoteles. Y después porque los que se sientan mejor rodeados de líneas depuradas, de tonos unificados y de toda la gama de tecnología moderna, han encontrado su establecimiento ideal. Ofrece muchas sorpresas. Un solo indicio: el rojo.
Muy lejos de las multitudes, en la costa noreste de Samui, en el Imperial Boat House destaca la completa y reciente renovación del conjunto de sus instalaciones, con una originalidad muy acertada: brindar la posibilidad de vivir en un barco, uno de verdad.
Este complejo, oculto en una de las bahías de Lamai Beach, se define por su elegancia sobria. En él predominan los tonos cálidos de la madera combinados con el verde de los bambúes, que le confieren al lugar una atmósfera tranquila totalmente oriental. Efectivamente, las prestaciones que se ofrecen son las de un establecimiento de lujo. La paz y la tranquilidad son las dos palabras clave de este establecimiento discreto, pero que ya empieza a tener sus clientes habituales.