Gonzalo González Beneytez
Jefe de sección
Este magnífico hotel merece sus 5 estrellas. Fue construido en 2005 y ofrece todas las comodidades, además de servicios de lujo. Dispone de una situación ideal para descubrir el casco antiguo. Es, sin duda, uno de los hoteles más bonitos de la Habana.
Hotel Saratoga - © Hôtel Saratoga
Hotel Saratoga - © Hôtel Saratoga
Situado en pleno centro de la Habana, el Saragota se encuentra frente al Capitolio, en el cruce de la avenida Paseo del Prado y la calle Dragones.
96 habitaciones con decoración contemporánea o colonial, pero siempre de lujo. Existen varios tipos de habitaciones: las modernas están en la primera y segunda planta; las coloniales con grandes puertas y ventanas y a veces con balcones y las habitaciones para fumadores están en la quinta y sexta planta; y otras 40 habitaciones con patio. La mayor parte de las habitaciones tiene vistas al Parque de la Fraternidad. Las que dan al patio interior son más baratas. El cuarto de baño, decorado con azulejos color azul turquesa, dispone de ducha, bañera y un inmenso lavabo. Al igual que en cualquier hotel de lujo, los clientes disponen de una báscula.
El Saratoga, abierto a finales de 2005, se instala en un edificio construido en 1933 y que solo tenía 3 plantas hasta 1949, año en el que se construyeron otras 5 adicionales. Consta de un interior de diseño y muy elegante. El recibimiento se lleva a cabo frente a un pequeño escritorio instalado en un sillón. ¡Qué categoría! Por encima de la recepción, bajo una cristalera, un agradable bar recibe a la clientela en un ambiente tropical. 7 plantas más arriba, por encima de las habitaciones y del spa que se encuentra en la 7ª planta, encontramos la terraza. ¡Y menuda terraza! Es grande y está bien acondicionada. Cuenta con una piscina que se extiende a lo largo y con un bar. Podrás tomar el sol frente a la ciudad contemplando las fantásticas vistas del capitolio y de la prestigiosa fábrica Partagas Cigar. El lugar es ideal para tomar una copa por la noche. Subiendo unos escalones encontrarás un centro de fitness con equipamiento de última generación y televisión individual.
En la planta baja, un magnífico restaurante sirve comidas a la carta para el almuerzo y la cena. Está dividido en dos: por un lado un bar para tomar una copa en un ambiente marroquí y por otro, mesas. La cocina es muy refinada. Los platos cuestan entre 14 y 35 pesos (las gambas). Junto a la piscina, un bar sirve bocadillos y ensaladas. Para tomar una copa hay dos bares: el de la terraza y el que está situado por encima de la recepción, al abrigo del sol.
El Saratoga está gestionado por la Oficina del Historiador de la Ciudad de la Habana a través de la empresa Habaguanex. Los beneficios se destinan a la renovación del centro histórico de la ciudad.
masaje, EPA, baño turco
gimnasia, water-polo, fitness
Este hotel es el más moderno y el menos típico de los hoteles de La Habana Vieja, pero su ubicación es ideal para descubrir este bullicioso barrio de La Habana por la noche.
El Tejadillo, con sus acogedores patios, conserva su encanto del pasado gracias a su decoración. Su situación lo convierte en uno de los hoteles más solicitados de La Habana.
Este hotel va a encantar a todos los enamorados de la arquitectura pues en cada planta, el estilo arquitectónico es diferente, pasando del siglo XVIII al XIX y del XIX al XX según la planta. ¡Descúbrelo!
El Inglaterra es de esos hoteles que dan alma a una ciudad. A 10 min de La Habana Vieja, en el inmenso Parque Central, el Inglaterra destaca como un antiguo palacio que ha perdido su fastuosidad. Conserva su encanto.
El Plaza es un hotel funcional y lleno de encanto situado en pleno centro. Un buen lugar para una estancia de corta duración en La Habana.
Al igual que otros muchos hoteles de La Habana, el Sevilla guarda preciadamente las rastros de su pasado entre sus muros. Un pasado decadente pero siempre mítico. Renovado en el año 2002, disfruta de una buena ubicación, confort de calidad y un encanto indiscutible.
El hotel, que celebró su 50º aniversario en 2008, está situado un poco al margen del centro de la ciudad, aunque da directamente al Malecón. Ideal para los jóvenes que quieran ir de fiesta y descubrir La Habana sin preocuparse del confort.
El Raquel, uno de los más bellos hoteles de La Habana, era un lugar de negocios para los comerciantes judíos, por eso las habitaciones tienen nombres de santos judíos y objetos religiosos que recuerdan su pasado.
Situado en pleno corazón del barrio colonial, el NH Parque Central es un establecimiento inaugurado en 1999. Es frecuentado por una clientela europea. Una apuesta segura.
Es un hotel para hombres de negocios. Sin embargo, el Meliá Cohíba no descarta a los turistas, que encontrarán allí lujo y confort. Su piscina en la azotea y la carta de su restaurante italiano merecen una parada.
Este hotel, muy agradable, es ideal para los que desean visitar tranquilamente la ciudad.
Al igual que otros muchos hoteles de La Habana, el Sevilla guarda preciadamente las rastros de su pasado entre sus muros. Un pasado decadente pero siempre mítico. Renovado en el año 2002, disfruta de una buena ubicación, confort de calidad y un encanto indiscutible.
El ambiente marino es el punto de encuentro. El Amadores de Santander es un hotel con encanto que encantará a los enamorados del mar.
Este hotelito es muy original y agradable. Para los que desean meditar y descansar en pleno corazón de La Habana Vieja.
El hotel Santa Isabel es un pequeño palacio para turistas acomodados. Apenas tiene unas 30 habitaciones y una ubicación perfecta, en el corazón del casco antiguo de La Habana. Es una pena que el proyecto de ampliación haya quedado en el olvido. Asunto pendiente.
El Inglaterra es de esos hoteles que dan alma a una ciudad. A 10 min de La Habana Vieja, en el inmenso Parque Central, el Inglaterra destaca como un antiguo palacio que ha perdido su fastuosidad. Conserva su encanto.