Construido en 1986, y renovado por última vez en 2004, el Kenzi Club Oasis (antiguo club Valtur) ocupa 9 hectáreas de exóticos jardines, admirablemente mantenidos, entre los que destaca el paseo de naranjos de la entrada. De forma muy acertada, el establecimiento se divide en dos partes bien diferenciadas. Por un lado, la piscina concentra la de mayor actividad, en la que se desarrollan las animaciones. Por otro lado, las 221 habitaciones ?de las cuales 17 son suites triples y 18 suites cuádruples? se esconden en pequeñas construcciones de una planta de influencias árabes y moriscas. Estas edificaciones se conectan por una serie de patios floridos, en los que el único elemento discordante es el ruido del agua de una fuente. Al borde de la piscina, sin embargo, la vida transcurre activamente, con un solárium en el que las espaciosas gradas reservan un rayo de sol para cada huésped. Muy cerca, se encuentran un agradable bar, situado bajo una pérgola, el club infantil (3-12 años), el hammam, el gimnasio y la sala de espectáculos. Por los jardines se diseminan varios campos de deporte, con cuatro pistas de tenis y una cancha de prácticas de golf. Para los amantes de las compras, el club cuenta con una pequeña tienda de souvenirs, que recibe periódicamente a artesanos locales. Para fumar en cachimba o saborear un café o un té, los huéspedes pueden acudir entre las 23:00 y las 02:00 a la tetería, a cuyo frente se encuentra Idrissi, un simpático animador. El establecimiento también cuenta con un piano bar y una discoteca.
Animaciones
El club emplea a un equipo de dinámicos animadores, compuesto por 22 personas; 7 de ellas están tituladas. Durante el día, se desarrollan numerosas actividades lúdicas y deportivas (activación muscular, gimnasia, aerobic, step...) de forma ininterrumpida. Otras opciones son el tenis, el fútbol, el voleibol, el tiro con arco, la petanca o el golf. Sadek, el instructor de golf, solía acompañar a Hassan II en sus torneos. También se ofrecen cursos de idiomas y cocina, y se proyecta un documental sobre Marruecos. Idrissi, un animador titulado con 35 años de experiencia, acompaña con su simpatía y amabilidad a los que deseen conocer a los habitantes de la zona. Por la noche, el teatro acoge los espectáculos del personal del hotel y, de vez en cuando, actuaciones profesionales.