


Ubicado cerca de la estación de Marrakech, el Ryad Mogador Guéliz mezcla un decorado tradicional marroquí con instalaciones más modernas. La fachada tiene un aire un poco inhóspito pero las habitaciones son cómodas y funcionales.
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Ubicado cerca de la estación de Marrakech, el Ryad Mogador Guéliz mezcla un decorado tradicional marroquí con instalaciones más modernas. La fachada tiene un aire un poco inhóspito pero las habitaciones son cómodas y funcionales.
Situado cerca de la estación de Marrakech, a unos 5 minutos del céntrico bulevar Mohammed V, el Ryad Mogador Guéliz está a 30 min a pie de la plaza Jemaa El Fna y a 15 min en taxi del aeropuerto.
La decoración de las 300 habitaciones es similar a la del Ryad Mogador Agdal: piso embaldosado recubierto de tapices, muebles de contrachapado marrón oscuro?Todas tienen los equipamientos básicos a saber televisión, caja fuerte gratis, aire acondicionado y calefacción. Algunas miran a la estación y otras a la piscina. Las 5 suites además poseen un cuarto de vestir, moqueta mullida, dos escritorios de madera, dos baños, un living con sillones y dos balcones.
Inaugurado en octubre del 2008, el Ryad Mogador Guéliz tiene la ventaja de la modernidad de las infraestructuras. La entrada del hotel con su gran araña, sus grandes columnas y su piso de mármol recuerda al hall del Ryad Mogador Agdal. Un pasillo con moqueta mullida conduce a la primera planta. El salón de televisión luce moqueta roja, sillones adamascados y grandes lámparas con pantallas rojas. Otro salón con moqueta verde y amplios sillones permite saborear un té con menta. El spa mira hacia la piscina externa que es grande y está rodeada de tumbonas. Es una lástima la falta de plantas y la vista hacia al edificio naranja no es de lo más atractiva.
En el restaurante internacional, las comidas se sirven en forma de bufé: el desayuno de 6h30 a 10h30, el almuerzo de 12h30 a 14h30 y la cena de 19h a 22h30. Esta sala puede acoger a 250 huéspedes. El restaurante a la carta con su gran sala blanca, su techo pintado y sus arañas verdes propone platos diversos y especialidades como pasteles de mariscos con hojaldre, carne con salsa y verduras, tarta de manzanas. Y también existe la opción de almorzar al lado de la piscina.
El hotel pertenece a la cadena marroquí Ryad Mogador, por ello la decoración es muy similar en los distintos establecimientos. Aquí no se sirve alcohol. La mayoría de los clientes de este establecimiento proviene de España.
(wifi gratis en todas partes)
masaje, salón de belleza, sauna, hammam, puesta en forma, EPA, baño turco, wellness
gimnasia, golf, water-polo, fitness, deportes
Bonne prestation et bon accueil
accueil,piscine,calme,proche de gueliz et de la grande avenue Mohamed VI ainsi que de l'aeroport
proche de la gare des trains
l hotel est décevant pour sa catégorie
relativement proche du centre ville
mal insonnorisé, atmosphère froide(hopital) et restauration plus que pitoyable
El Campaville, situado a 15 min en coche (o autobús de pago) de la plaza Jemaa el Fna, ofrece relajación y tranquilidad en un ambiente agradable donde palmeras, olivos y limoneros se codean. A pesar de su situación un poco alejada del centro, el Campaville es sin duda un hotel de encanto. Un buen lugar donde relajarse en un marco muy agradable.
El Sangho es un club ideal para unas animadas vacaciones en familia o entre amigos. Su parque de 11 ha, sus numerosas infraestructuras y una descomunal piscina, son algunos ejemplos de sus atractivos.
El Red House es un "pequeño castillo" frente a las murallas que dispone de ocho suites de lujo. Dispone de un restaurante gastronómico de reconocido prestigio en el exterior.
Al descubrir el amplio espacio de recepción sorprende la poca cantidad de habitaciones que alberga este hotel. Y esta es una de sus ventajas. La zona de la piscina y la decoración de las habitaciones también son atractivas. Sin embargo decepciona el spa y el aspecto macizo del edificio de fuera.
El Hivernage hotel and spa, situado en el barrio del mismo nombre, resulta cómodo para parejas y los amantes de los spa y del deporte. Solo lamentamos la ubicación de la piscina, un poco escondida, en la sombra del edificio y con poca vista.
Más parecido a un palacete italiano que a un riad marroquí, el Riad Lotus Privilege seduce por su originalidad. Aquí los detalles se cuidaron con mucho empeño. Sin embargo, aquellos que busquen algo más tradicional se sentirán un poco frustrados.
¡Otro de los muchos hoteles del Palmeral! Aquí tenemos un nuevo hotel club en Marrakech. Algo que no es nada nuevo ni original bajo el sol de Marrakech. El hotel Cosy Club Marmara Dar Atlas, se ve sencillo y familiar, aunque confortable. Este nuevo concepto de Cosy Club Marmara permite disfrutar la jornada en un club zen (música de salón, cursos de yoga, etc.) en un lugar donde las actividades son discretas. El trato acogedor de la directora sin duda os alegrará la estancia.
El hotel Farouk es una dirección muy económica situada en Gueliz, avenida Hassan II próximo del centro. Cuando lo visitamos en abril 2013, estaba en obras: ciertas las habitaciones han sido reformadas. Se parece más a un albergue juvenil que a un verdadero hotel, sin embargo es muy limpio y si estas allí por un par de noche, es aceptable.
Este lugar mágico y único es difícil de definir. El Palais Namaskar es algo totalmente diferente de lo que se suele encontrar en Marrakech. Es simplemente una maravilla, un auténtico palacio lujoso sin el mal gusto del que pecan algunos hoteles de lujo. El Palais Namaskar no pretende brillar ni ostentar, sino que se basa en la sobriedad y el refinamiento. El lujo queda patente en sus magníficos jardines, en el servicio personalizado que los clientes recibirán desde la entrada al hotel, en la decoración elegante y en la ausencia de extravagancias. El Palais Namaskar se convertirá en el lugar predilecto de una clientela exigente, discreta y sobre todo, rica.
Miembro de la prestigiosa cadena francesa Relais & Châteaux, la Villa des Orangers pone a la disposición de aquéllos que desean combinar las comodidades con el saber vivir marroquí, un marco tradicional y un servicio inigualable. Su piscina con vistas panorámicas al casco antiguo y al Atlas es otro de sus atractivos.
Les Jardins de la Koutoubia, uno de los hoteles de lujo de Marrakech, cuenta con una ubicación privilegiada en pleno centro de la ciudad, detrás de las murallas de la Medina. Un marco suntuoso, mezcla de tradición marroquí y del estilo contemporáneo más chic, así como un servicio excelente, cautivarán a los que dan prioridad al confort.
Con un oasis de verdor a las puertas de la ciudad antigua, el Sofitel Marrakech es un lugar de gama alta que ofrece un entorno agradable, una comodidad de un cinco estrellas y un excelente servicio.
El Taj Palace Marrakech, un hotel desmesurado y fastuoso, dará mucho que hablar y atraerá las visitas de muchos curiosos. Aquellos que puedan permitirse alojarse en un palacio apreciarán el servicio personalizado, la acogida digna de un rey y el detallismo presente en la decoración. Una decoración cargada y llamativa que seguramente no será del gusto de todos. Sin embargo, el lugar merece una visita y atraerá la curiosidad de los turistas.
Calma y tranquilidad, pero también lujo y servicios de alta gama. Nada es demasiado para los clientes acomodados. El Amanjena apuesta por los grandes espacios en una arquitectura de inspiración árabe-andalusí. Algunas personas lo encontrarán demasiado «vacío». Es cierto que sus largos pasillos no invitan al paseo. Pero el Amanjena es un valor seguro si hablamos de alojamientos de lujo.
El Mansour Eddahbi es un lujoso establecimiento situado en el complejo del Palacio de Congresos, que ofrece modernas y múltiples comodidades. Satisfará tanto a los hombres de negocios como a los viajeros que desean disfrutar de un máximo de confort. Pero si buscas intimidad, este no es el lugar ideal.
El Selman, un hotel de lujo muy elegante, se desmarca de los demás hoteles de su categoría gracias a su caballeriza con 12 purasangres árabes. Decorado por Jacques Garcia, el hotel podría parecer un pequeño Mamounia, de Marrakech, aunque la caballeriza le aporta otra dimensión totalmente diferente. El spa Chenot, exclusivo, hará las delicias de los incondicionales de este famoso método de tratamientos.