220 habitaciones un poco pequeñas con una decoración refinada en un estilo de diseño, como el resto del hotel. Numerosas lámparas originales contrastan con los objetos antiguos como una cabeza de buda de piedra bajo una campana o una fotografía que representa la cultura india. Un libro de oraciones con una oración para cada día da el refrán del día. El equipamiento de alta tecnología con pantalla plana y el lector de DVD se combinan perfectamente con el mobiliario cómodo compuesto por dos asientos de piel y una mesa baja. Los cuartos de baño están equipados con una pequeña bañera y un lavabo colocado sobre una mesa. Se accede a ellos por una puerta corredera, que evita que se pierda espacio. En cuanto a las vistas, como estamos en pleno centro, cuanto más alto estamos, mejor es la vista.
Las habitaciones de la 10ª planta son magníficas. Han plantado hierba bajo el televisor de pantalla plana gigante y hay una bañera que recuerda a una piscina que permite bañarse en familia (como los japoneses) mientras ves una película gracias a la televisión colgada de la pared.

El hotel tiene 10 plantas, por lo que no tiene nada especial desde el exterior, pero te sorprenderá una vez que entres en el vestíbulo. Cortinas de perlas de colores, salón rosa y azul, mobiliario de ultra diseño, pasearás por el hotel como si estuvieses en una galería de arte. El interior es sorprendente y divertido. En cambio, el exterior es un poco decepcionante. La terraza alberga una escultura y no está rodeada de mesas ni tumbonas. Un poco más lejos, la piscina, pequeña pero de diseño, encima de la cual hay una gran bola de cristal que refleja la luz. La terraza que la rodea no es muy amplia, pero hay un bar justo al lado que pone música hasta la 01:00 h en el que podrás tomar una copa sin que te salpiquen. Una planta más arriba se encuentra el spa Aura, pequeño pero moderno. Está compuesto por una peluquería, cabinas de masaje, sauna y un gimnasio. Y para los amantes de la relajación, hay clases de yoga todas las mañanas y las tardes en la terraza de madera de delante del spa.

Justo al lado del bar hay un restaurante indio que suelen frecuentar numerosas personalidades y que recomendamos totalmente por su elegancia. El restaurante, sin embargo, no está a la altura de un 5 estrellas. La decoración azul con la temática del agua es original, la comida es buena, pero la originalidad y la selección no son de lo mejor. Además, una copa de vino vale 10 euros. Recuerda llevarte un jersey porque tienen el aire acondicionado a tope y te congelarás en seguida. Los más golosos tienen que ir al bar restaurante MIST en el que se venden puros y pasteles (que vienen de una de las mejores pastelerías de la India).
Después de comer, siempre puedes ir a un bar, muy moderno y de diseño, que suelen frecuentar los famosos. Se trata del bar más largo de Nueva Delhi (mide 11,50 metros de largo).

El famoso diseñador Conran & Partners ha sido el encargado de decorar este hotel y para ello se ha inspirado en los cinco elementos. Por ejemplo, encontrarás la temática del aire y del espacio en la recepción y del agua en el restaurante MIST.