Las 670 habitaciones están repartidas en 33 pisos, es decir, hay unas 20 habitaciones por piso. Como era de esperar, las habitaciones disponen de todo lo necesario para aquellos que viajen por negocios, con un equipamiento de alta gama y un gran confort. La identidad, obviamente, no es el punto fuerte del hotel, ya que se trata de una cadena hotelera internacional y no posee demasiado encanto. No obstante, las habitaciones cuentan con una bonita moqueta, aunque los tonos sean ligeramente kitsch, muebles de madera clara al estilo noruego y equipamientos muy prácticos si se viaja por negocios: minibar (ten en cuenta que, desde el momento en que coges una bebida del frigorífico, ya tienes que abonar su importe), plancha para pantalones, caja de seguridad, hervidor de agua, etc. Finalmente, los cuartos de baño, donde podrás relajarte tras un largo día de frío, disponen, en el 90% de las habitaciones, de bañera, algo muy agradable en un país donde la temperatura exterior no suele superar los 15° C. También es de apreciar el gran surtido de productos de tocador y el amplio espejo.