


Este hotel, con una arquitectura típicamente parisina, ofrece unas habitaciones en las que no se ha dejado de lado el toque moderno. Delimitado por el Sena y por el mundo de las artes, es el lugar ideal para sumergirse en el París más artístico.
Este hotel, con una arquitectura típicamente parisina, ofrece unas habitaciones en las que no se ha dejado de lado el toque moderno. Delimitado por el Sena y por el mundo de las artes, es el lugar ideal para sumergirse en el París más artístico.
14/20
Perpendicular a los muelles del Sena, la rue de Lille está en el cruce de caminos de Saint-Germain-des-Prés y sus galerías, del Museo de Orsay y también del Louvre, ya que solo tendrás que cruzar el Pont Royal o el del Carrousel para llegar al jardín de las Tullerías y al patio de Napoleón donde se encuentra la pirámide.
Las habitaciones son de tamaño modesto, obligadas por la arquitectura del barrio. Cada piso se va renovando progresivamente con un nuevo estilo. Los colores predominantes son modernos (naranja, beige) y, en el cabecero de la cama, hay una gran litografía que representa un gran monumento parisino. Sin duda, apreciarás la presencia de la caja fuerte y de la conexión wifi, ambas gratuitas. En poco tiempo, todas las televisiones serán de pantalla plana.
El hotel, situado en un edificio de baja altura, típico de la rue de Lille, abrió sus puertas a principios del siglo pasado. De hecho, fue víctima de la gran crecida acaecida en 1910. En la actualidad, se puede desayunar, sin riesgo alguno, en una bonita bodega abovedada. El pequeño bar (abierto hasta la 01:00 h) y el vestíbulo pronto se renovarán.
EPA
Elegante, lujoso y perfectamente situado, alojarse en el Hotel Montalembert te aportará todo ventajas. Su ubicación privilegiada lo convierte en un lugar superatractivo. Está emplazado en uno de los barrios más distinguidos de París: Saint Germain des Prés , en plena « Rive Gauche », por lo que alojarte en él te facilitará encontrar las mejores galerías de arte, boutiques de reconocido prestigio, y además, en solo cinco minutos, podrás estar y visitar dos de los museos más destacados de la capital: el museo d'Orsay y el Louvre. De este hotel 4 estrellas te sorprenderán sus equipamientos de última tecnología y las atenciones que te brindará el personal. Es idóneo para las familias, pero acoge sobre todo a un público de negocios.
El Lenox ha sabido modernizarse, aunque conservando su espíritu art déco.
Esta antigua casa comercial es un establecimiento de encanto al servicio de su clientela.
Comparte tu estancia con los maestros del impresionismo. Desafortunadamente, las habitaciones no gozan de la luz presente en sus cuadros.
Frente al Sena, escoge la habitación de Baudelaire o de Wagner. Este hotel es sobrio y clásico, pero no deja de lado su faceta artística.
Este antiguo palacete te ofrece todo el encanto de la Edad Media en su decoración, que alterna con la modernidad de su equipamiento.
Situado en un barrio tranquilo, cerca de Saint Germain-des-Près y de las orillas del Sena, este dos estrellas ofrece comodidad a sus huéspedes.
Un 2 estrellas muy bien ubicado.
Estamos ante un hotel de elegancia francesa y en el que no se tolera ninguna copia ni reproducción. El Bristol forma parte de los pocos hoteles de lujo parisinos que pertenecen a una familia europea (alemana) en lugar de a las grandes familias asiáticas o de los Emiratos Árabes Unidos. Elegante, distinguido y refinado, el Bristol antepone la calidad y la autenticidad de los objetos y materiales. Su restaurante gastronómico atrae a una clientela exigente y amante de la cocina de alta calidad.
El George V hace parte de los palacios parisinos más prestigiosos de la ciudad. Unos pasos dentro el establecimiento son suficientes para darse cuenta que entramos en un hotel donde lujo, perfección y voluptuosidad son la regla. Habitaciones de princesa, salones impresionantes, restaurante el que guía Michelin ha otorgado una estrella, no falta nada al George V para satisfacer a los clientes más exigentes. El diseñador de interior Pierre Yves Rochon se encargo en 1997 de reformar en totalidad el edificio, desde entonces sigue mejorando la decoración de acuerdo con el estilo XVIII siglo.
El último de los palacios parisinos abrió sus puertas el 1 de agosto de 2014. La elegancia y la sofisticación francesa casan a la perfección con el refinamiento asiático en un magnífico edificio de 1908. He aquí el primer establecimiento del grupo Peninsula en Francia y Europa.
Hicieron falta cinco edificios Haussmann para dar vida al Park Hyatt Paris Vendôme, el primer hotel de lujo de la capital concebido con un estilo contemporáneo. En este hotel, la comodidad, la elegancia y un servicio impecable se unen a un diseño más joven y moderno.
El Meurice es uno de los mejores establecimientos de París. Su decoración contemporánea y típicamente parisina es obra de Philippe Starck y su hija. Se trata de un lugar exclusivo: el restaurante principal del hotel, Le Meurice, está dirigido por el chef Yannick Alléno, que ha recibido 3 estrellas. No hace falta decir que es uno de los puntos culminantes de la estancia en este hotel. Su ubicación es ideal, justo delante del Jardín de las Tullerías. Las habitaciones están decoradas con gusto y el servicio es impecable.
El W Paris - Opéra finalmente abrió sus puertas el 28 de febrero de 2012. Así, la marca de Starwood ligada a la moda y a las tendencias se asegura un establecimiento de prestigio en París.
El hotel, situado en un edificio del siglo XIX, salta a la vista. Diseño y modernidad se combinan junto con un toque conceptual. Mejor pedir explicaciones al diseñador, ya que es difícil captar el mensaje de otra forma; aunque está claro que el W Paris-Opéra gira alrededor de un tema: The Spark. El establecimiento se define en este "centelleo", creando una unión ficticia entre el primer hotel de Nueva York y su hermano pequeño parisino.
En el corazón de la ópera, el W ya cuenta con los amantes de la marca y espera que el boca a oreja lo convierta en the place to be del barrio, junto con su restaurante y su bar.
Un establecimiento de alta categoría ideal para personajes famosos y estrellas de cine que busquen un poco de discreción. La Réserve Paris se preocupa por la confidencialidad. También se organizan eventos privados.
Como anuncia el propio eslogan, este hotel es "Votre adresse à Paris" (Tu establecimiento en París): de hecho, no existen demasiados lugares como este en la capital. La diferencia entre una estancia agradable y una memorable reside en los detalles y, sin lugar a dudas, recordarás con emoción tu paso por el Vendôme. Nada más entrar, te recibirán unos porteros tan sonrientes que te sentirás como si fueses el cliente más importante del hotel. Tanto si vas por negocios como por turismo, este hotel boutique satisfará todas tus necesidades con estilo y elegancia.