


Un valor seguro en el barrio, con una buena relación calidad-precio.
- Familia
Un valor seguro en el barrio, con una buena relación calidad-precio.
El hotel Opéra Lafayette goza de una situación envidiable, cerca del París turístico y del de negocios. Está situado frente a la magnífica plaza Montholon, a unos cientos de metros de la estación del Norte y del RER B, que comunica la ciudad con los aeropuertos de París y el Parque de Exposiciones de París Villepinte. También está cerca del animado barrio de los Grandes Bulevares y a pocos minutos a pie de los Grandes Almacenes y de la Ópera. Cuenta en sus alrededores con numerosos restaurantes. Asimismo, justo delante hay un aparcamiento público de pago. Metro más cercano: Cadet.
Las habitaciones son agradables, amplias, modernas y luminosas (gracias a dos ventanales que dejan entrar mucha luz natural). El escritorio y la silla no se comen mucho espacio. Cuenta con múltiples prestaciones: televisión con canales vía satélite y Canal +, minibar (vacío) y climatización individual (pendiente de instalación), pero no dispone de servicio de habitaciones. La conexión wifi es gratuita hasta las 22 h. El cuarto de baño, de mármol grisáceo, es atractivo, y dispone de secador de pelo y ducha. Hay algunas habitaciones con bañera, solicítalas si lo deseas. Además, podrás tomar el desayuno en la habitación.
El hotel se encuentra en un atractivo inmueble típicamente parisino. La bonita sala del desayuno se ve desde el exterior, singular por su veranda que sobresale a la acera. En el interior hay un vestíbulo amplio y luminoso. El suelo es de mármol, la decoración moderna y el bar está a disposición de los huéspedes las 24 horas del día. De camino a tu habitación verás que los pasillos también están bien cuidados.
El hotel no tiene restaurante. No obstante, cuenta con un bar. El desayuno se sirve de 07:00 a 10:00 h.
El barrio en el que está situado el hotel Opéra Lafayette es conveniente, sin ser excepcional, y representa un punto de partida relativamente adecuado para acceder a las principales atracciones de la ciudad. Aparte de eso, el hotel no nos parece un buen establecimiento de tres estrellas. Le vendría bien someterse a unas reformas para que le dé un mayor toque de elegancia.
baño turco, sauna
fitness, btt
Trés bien situé, personnel agréable! je recommande!
Situation, Propreté
Salle de bain étroite, vielle infrastructure
Hôtel bien situé à 10 minutes à pied du quartier de Montmartre. Chambre correcte mais un peu vieillote, salle de bain propre mais étroite.
Situation Petit déjeuner buffet Accueil et disposition du personnel
Décoration Pas de parking (compter 30? de parking pour 24h juste en face de l'hôtel)
Un hotel de 3 estrellas con encanto
Un 3 estrellas de barrio con precios razonables.
Un establecimiento muy bonito para los amantes del diseño en pleno corazón del París turístico.
Un buen establecimiento con una buena relación calidad-precio.
Agradable hotel con decoración marina y espacios comunes muy logrados. Las habitaciones se dividen en dos temáticas de color, a cuál más acogedora.
Este establecimiento perteneciente a la prestigiosa cadena es un lugar con encanto.
Un hotel de 3*** bien situado, frente a la bonita plaza Montholon.
Un hotel moderno y sobrio, aunque un poco caro.
Estamos ante un hotel de elegancia francesa y en el que no se tolera ninguna copia ni reproducción. El Bristol forma parte de los pocos hoteles de lujo parisinos que pertenecen a una familia europea (alemana) en lugar de a las grandes familias asiáticas o de los Emiratos Árabes Unidos. Elegante, distinguido y refinado, el Bristol antepone la calidad y la autenticidad de los objetos y materiales. Su restaurante gastronómico atrae a una clientela exigente y amante de la cocina de alta calidad.
El George V hace parte de los palacios parisinos más prestigiosos de la ciudad. Unos pasos dentro el establecimiento son suficientes para darse cuenta que entramos en un hotel donde lujo, perfección y voluptuosidad son la regla. Habitaciones de princesa, salones impresionantes, restaurante el que guía Michelin ha otorgado una estrella, no falta nada al George V para satisfacer a los clientes más exigentes. El diseñador de interior Pierre Yves Rochon se encargo en 1997 de reformar en totalidad el edificio, desde entonces sigue mejorando la decoración de acuerdo con el estilo XVIII siglo.
El último de los palacios parisinos abrió sus puertas el 1 de agosto de 2014. La elegancia y la sofisticación francesa casan a la perfección con el refinamiento asiático en un magnífico edificio de 1908. He aquí el primer establecimiento del grupo Peninsula en Francia y Europa.
Hicieron falta cinco edificios Haussmann para dar vida al Park Hyatt Paris Vendôme, el primer hotel de lujo de la capital concebido con un estilo contemporáneo. En este hotel, la comodidad, la elegancia y un servicio impecable se unen a un diseño más joven y moderno.
Un establecimiento de alta categoría ideal para personajes famosos y estrellas de cine que busquen un poco de discreción. La Réserve Paris se preocupa por la confidencialidad. También se organizan eventos privados.
El Meurice es uno de los mejores establecimientos de París. Su decoración contemporánea y típicamente parisina es obra de Philippe Starck y su hija. Se trata de un lugar exclusivo: el restaurante principal del hotel, Le Meurice, está dirigido por el chef Yannick Alléno, que ha recibido 3 estrellas. No hace falta decir que es uno de los puntos culminantes de la estancia en este hotel. Su ubicación es ideal, justo delante del Jardín de las Tullerías. Las habitaciones están decoradas con gusto y el servicio es impecable.
El W Paris - Opéra finalmente abrió sus puertas el 28 de febrero de 2012. Así, la marca de Starwood ligada a la moda y a las tendencias se asegura un establecimiento de prestigio en París.
El hotel, situado en un edificio del siglo XIX, salta a la vista. Diseño y modernidad se combinan junto con un toque conceptual. Mejor pedir explicaciones al diseñador, ya que es difícil captar el mensaje de otra forma; aunque está claro que el W Paris-Opéra gira alrededor de un tema: The Spark. El establecimiento se define en este "centelleo", creando una unión ficticia entre el primer hotel de Nueva York y su hermano pequeño parisino.
En el corazón de la ópera, el W ya cuenta con los amantes de la marca y espera que el boca a oreja lo convierta en the place to be del barrio, junto con su restaurante y su bar.
Como anuncia el propio eslogan, este hotel es "Votre adresse à Paris" (Tu establecimiento en París): de hecho, no existen demasiados lugares como este en la capital. La diferencia entre una estancia agradable y una memorable reside en los detalles y, sin lugar a dudas, recordarás con emoción tu paso por el Vendôme. Nada más entrar, te recibirán unos porteros tan sonrientes que te sentirás como si fueses el cliente más importante del hotel. Tanto si vas por negocios como por turismo, este hotel boutique satisfará todas tus necesidades con estilo y elegancia.