


Este establecimiento es un verdadero encanto sobre todo si los ambientes familiares te seducen. El hotel Edelweiss es antes de todo una historia de familia, de hecho los dueños son una pareja que recibieron el establecimiento de sus padres. Cuando entras ya se nota, Philippe y Marie Elysabeth se comparten el trabajo en un ambiente alegre. La acogida es muy simpática y como el Edelwiess esta abierto todo el año, esta frecuentado por los habitantes del pueblo y tiene sus clientes habituales.