En las habitaciones hay las mismas baldosas hexagonales rojas de la recepción, aunque salpicadas de alegres alfombras. Es difícil permanecer indiferente ante su decoración, con un estilo que recuerda a Goa, en la India. Todo está bien presentado y es original: una bonita cama con la colcha completamente verde, una mesilla de noche de diseño de color violeta, un sillón y cuadros que alegran las blancas paredes. La puerta de la entrada está decorada con una gran cuchara violeta (una referencia al nombre del restaurante, "Spoon", "cuchara" en inglés). Sin embargo, disponen de un equipamiento limitado ya que no hay televisión, caja fuerte, nevera ni minibar. Es una lástima que no haya balcón. No obstante, cuentan con climatización individual silenciosa, un ventilador y acceso gratuito a Internet wifi. El cuarto de baño es espacioso y está adornado con bonitos motivos. Incluye una cabina de ducha flexible, servicios y bidé, aunque no proporcionan productos de tocador.