


El Embajador se encuentra a tres kilómetros del barrio colonial. En este hotel de categoría internacional el ambiente es ante todo lujoso. Las habitaciones son prácticas y cómodas pero sin ningún encanto.
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El Embajador se encuentra a tres kilómetros del barrio colonial. En este hotel de categoría internacional el ambiente es ante todo lujoso. Las habitaciones son prácticas y cómodas pero sin ningún encanto.
El hotel se encuentra en una zona residencial de la ciudad, cerca del mar y a tres kilómetros de la zona colonial. El edificio está integrado en un gran jardín con vegetación frondosa que atravesamos para ir a las pistas de tenis. Sólo se tarda unos veinte minutos en llegar al aeropuerto interior de Herrera y 50 min al aeropuerto internacional de Las Américas, en la carretera de Boca Chica.
Las 289 habitaciones que componen el hotel no tienen por supuesto ningún encanto pero la limpieza y el servicio son perfectos. Aire acondicionado, teléfono con línea directa al extranjero, televisión por satélite, mini-bar, caja fuerte, balcón con vistas a la piscina, al jardín o a la ciudad, posibilidad de tener una cama supletoria en la habitación doble, con un máximo de un adulto o de dos niños además en la habitación.
El Embajador, construido en 1956 y reformado en 1998/1999, mantiene ante todo una tradición basada en el lujo y los negocios. Se nota en el ambiente. No cuentes que en sus edificios te vas a impregnar de la cultura local. Hay que salir de la zona residencial para empezar a conocer un poco la verdadera vida dominicana.
El restaurante "El Porches" propone una cocina internacional y temática: España, Mediterráneo e Italia. Está instalado en una gran sala agradable, clara, con arcadas y columnas de ladrillos. Más intimista y elegante, el pequeño restaurante "El Jardín del Embajador" sirve con esmero (personal con vestimenta en blanco y negro y delantal) una cocina mediterránea refinada. Hay que contar de 55 a 70 € el plato.
No hay playa.
Nada más ver la inmensa recepción entiendes donde estás metiendo los pies. Parece que estamos en un aeropuerto rodeados de hombres de negocios entre dos aviones.
masaje, salón de belleza, sauna, hammam, puesta en forma, EPA, baño turco, wellness
tenis, gimnasia, golf, water-polo, fitness, deportes
El Mercure Comercial, idóneamente situado en la zona colonial, parece adaptado para efectuar una etapa en la capital en familia, pero no tanto para una estancia prolongada. La razón es su falta de encanto.
Este hotel boutique situado idealmente en el centro de la zona colonial de Santo Domingo, a tan sólo 100 metros de la primera catedral de las Américas, ofrece un confort moderno con un vestíbulo, bar restaurante y acceso gratuito a Internet. Un lugar excelente como punto de partida para descubrir los tesoros de la primera ciudad del Nuevo Mundo.
El hotel Nicolas de Ovando, en el corazón del casco viejo, es una construcción de 1502, la antigua vivienda del gobernador de América y ha sido reconocido patrimonio histórico de la humanidad por la Unesco. Ofrece a los amantes de los monumentos una exquisita estancia con carácter. Lujo, calma, belleza... No nos queda más remedio que rendirnos a los encantos de este monumento.
Situado a orillas del mar, en el Malecón, a 15 minutos a pie de la zona colonial de Santo Domingo, el Meliá Santo Domingo es un establecimiento elegante de la capital, orientado a una clientela de negocios y que dispone de una sala de fitness, un spa y una gran piscina situada en una terraza panorámica que ofrece bonitas vistas al mar. Este rascacielos de 12 pisos de altura no tiene demasiado encanto, aunque es un buen establecimiento con habitaciones cómodas: un buen lugar que sirve como punto de partida para descubrir los tesoros de la primera ciudad del Nuevo Mundo.
El Santo Domingo, situado en un barrio residencial de Santo Domingo, no muy lejos del mar, es uno de los hoteles más importante de la capital. Un lugar en el que se alojan numerosas personalidades oficiales que visitan el país, como hicieron los Reyes de España en septiembre de 2000. ¡Un indicativo de la categoría del lugar!
El hotel Nicolas de Ovando, en el corazón del casco viejo, es una construcción de 1502, la antigua vivienda del gobernador de América y ha sido reconocido patrimonio histórico de la humanidad por la Unesco. Ofrece a los amantes de los monumentos una exquisita estancia con carácter. Lujo, calma, belleza... No nos queda más remedio que rendirnos a los encantos de este monumento.
El Holiday Inn es un establecimiento de negocios situado en un tranquilo barrio residencial de la capital de Santo Domingo que debería responder a las expectativas de una clientela exigente gracias a su acceso gratuito a Internet, su excelente zona de piscina en la azotea y su lounge bar de ultra diseño. Sin embargo, está lejos de las playas y de la zona colonial.
Sobre el Malecón de la capital, Santo Domingo, el Renaissance Jaragua es uno de los hoteles más grandes de la ciudad. Te parecerá que estás casi en un resort de Punta Cana con su inmensa piscina lago en un extenso jardín tropical, el spa, el gimnasio, las cuatro canchas de tenis y hasta un casino.
Situado a orillas del mar, en el Malecón, a 15 minutos a pie de la zona colonial de Santo Domingo, el Meliá Santo Domingo es un establecimiento elegante de la capital, orientado a una clientela de negocios y que dispone de una sala de fitness, un spa y una gran piscina situada en una terraza panorámica que ofrece bonitas vistas al mar. Este rascacielos de 12 pisos de altura no tiene demasiado encanto, aunque es un buen establecimiento con habitaciones cómodas: un buen lugar que sirve como punto de partida para descubrir los tesoros de la primera ciudad del Nuevo Mundo.
Este hotel boutique situado idealmente en el centro de la zona colonial de Santo Domingo, a tan sólo 100 metros de la primera catedral de las Américas, ofrece un confort moderno con un vestíbulo, bar restaurante y acceso gratuito a Internet. Un lugar excelente como punto de partida para descubrir los tesoros de la primera ciudad del Nuevo Mundo.
Es difícil imaginar un hotel tras la fachada de esta casa azul de una planta idealmente situada en una esquina de la famosa calle de las Damas, la primera calle del Nuevo Mundo, en el corazón de la zona colonial protegida de Santo Domingo. El Coco es un hotel-boutique, como su nombre indica, y solo dispone de cinco habitaciones soberbiamente decoradas. No te puedes perder el restaurante panorámico sobre la azotea.
El Santo Domingo, situado en un barrio residencial de Santo Domingo, no muy lejos del mar, es uno de los hoteles más importante de la capital. Un lugar en el que se alojan numerosas personalidades oficiales que visitan el país, como hicieron los Reyes de España en septiembre de 2000. ¡Un indicativo de la categoría del lugar!
La Atarazana es una antigua casa familiar de 1860 que recuerda a las posadas brasileñas con su patio lleno de flores y su pequeño estanque con cascada. Este lugar encantador solo dispone de seis habitaciones pequeñas llenas de encanto. Serás recibido como en casa de un familiar por su propietaria, la alemana Suzanne. Este pequeño hotel está escondido en el corazón de la zona colonial de Santo Domingo, una ubicación ideal para explorar las riquezas de la primera ciudad de las Américas. Es uno de nuestros preferidos en Santo Domingo.