La casa colonial consta de una suite compuesta por dos habitaciones dobles con un baño común. Las otras tres casas disponen de dos estancias independientes, una de las cuales comunica con una habitación para niños en el piso superior. En lo referente a la arquitectura, del más puro estilo criollo, predomina la madera oscura. Las habitaciones, que cuentan con un mobiliario sobrio, están equipadas con bañera o ducha, teléfono, aire acondicionado individual, terraza panorámica con tumbonas y vistas al archipiélago de Les Saintes.

Cuenta con una espléndida vivienda colonial de 1927 y tres casas de campo construidas recientemente en el mismo estilo. El conjunto se esconde en un voluptuoso parque de grandes dimensiones.

Un buen restaurante de cocina típica y criolla exquisitamente preparada por la propietaria.

Le Jardin Malanga es un establecimiento entrañable, más parecido a una pensión familiar o a una casa de huéspedes que a un hotel. Su situación, aislada en la zona alta, hace que sea necesario alquilar un coche.
No tiene playa. La más cercana es la de Grande Anse, a 10 minutos en coche del establecimiento, y reconocida como una de las más bellas de Basse-Terre. Esto la convierte en un lugar al que acuden asiduamente los habitantes de la isla durante el fin de semana. Su arena fina, sus olas y un pequeño restaurante de madera la convierten en un lugar con mucho encanto.