Cuna de la civilización dravidiana, Tamil Nadu irradia por su gran riqueza cultural y artística. La región es conocida por sus innumerables templos repartidos por todo el país. Coronados por torres-pórticos y laboriosamente decorados con esculturas policromadas, los santuarios se transforman en ciudades-templos, como sucede en Madurai. En Chennai, la capital, la diversión y la modernidad conviven con las huellas del pasado y contrastan con la tranquilidad de los pueblos y de las estaciones climáticas de las montañas.
La artesanía de la India es muy laboriosa. En Tamil Nadu vas a encontrar saris de seda y telas de algodón tejidas a mano, sobre todo en Kanchipuram. Compra estatuas de piedra y piezas de bronce de Mamallapuram; instrumentos de música, objetos de bronce y lámparas de aceite típicas en el sur de la India; objetos esculpidos en madera de sándalo; marroquinería y joyas decoradas de diamantes o de piedras semipreciosas en Kanchipuram. Y un gran puñado de especias naturales. En Chennai, la avenida Anna Salai es el centro de los barrios comerciales de la ciudad.
Visita los State emporium, almacenes estatales de los diversos estados de la India en donde los precios son fijos. En cualquier otra parte se puede regatear. En las grandes ciudades las tiendas abren de lunes a sábado entre 10:00 y 19:00 ó 20:00. Cierran los domingos y festivos.
Está prohibido exportar artículos de piel, pieles de serpiente y antigüedades, así como importar en Europa cualquier objeto de marfil.
Hay una gran variedad de platos dependiendo de cada Estado, del origen de las poblaciones y de sus castas respectivas. Lo único que tienen en común es el arroz y el té. El curry es la base de muchos platos. La cocina del sur de la India es más fuerte y picante que en el norte. Añade yogur (tayré) para suavizar los platos. En Tamil Nadu hay mucha cocina vegetariana. Puedes disfrutar de una gran cantidad de pescados y crustáceos. Prueba los thalis tradicionales, un conjunto de platos vegetarianos con arroz, varios curries de verduras, condimentos, puris o chapatis, tortas de trigo que sirven de pan. Prueba los chutneys, verduras o frutas maceradas; los idlis, albóndigas de arroz a menudo acompañadas con una salsa de yogur picante: el dahin idli; los dosas, crepes de harina de lentejas o un masa dosa, relleno de verduras picantes, un piscolabis perfecto. Sin olvidar los platos a base de coco, mango y de todas las frutas que se empapan de sol. De postre puedes degustar el kheer, arroz con leche y el kulfi, una especie de helado cremoso de pistacho. Y disfruta bebiéndote un payasam, una bebida azucarada de leche de coco, pulpa de mango, anacardos y especias. Y tampoco te olvides de probar los numerosos y baratos platos de la calle que te ofrecen los vendedores ambulantes. Se aconseja no comer en los puestos y en los restaurantes en donde no hay gente.
La India hinduista supone un fuerte contraste cultural. La mayoría de las relaciones humanas se rigen según un sistema jerarquizado de castas en donde cada individuo tiene una función definida. La vaca es un animal sagrado.
En los templos hindúes, jainistas y en las mezquitas debes quitarte los zapatos antes de entrar. Lo mismo sucede para entrar en los templos sikhs en donde también hay que cubrirse la cabeza. No olvides quitarte todos los artículos de cuero que lleves antes de entrar en los templos jainistas. En cuanto a las mezquitas, asegúrate de que se admite la entrada a los turistas durante la oración y de que está permitida la entrada a las mujeres. Cúbrete los brazos y las piernas y no lleves un aspecto desaliñado. En cualquier caso, no toques ninguna escultura ni la estatua de una divinidad. La entrada al Santo de los Santos, el santuario interior, de los templos hindúes está prohibida a los que no son hindúes pero en el de Kailashanatha, en Kanchipuram, se puede entrar.
En la vida cotidiana no se toca con los pies a una persona. Si vas a regalar flores, infórmate sobre su simbología para no meter la pata. Cuando alguien recibe un regalo lo guarda aparte para abrirlo más tarde. Mientras comes quítate los zapatos si tus anfitriones no llevan los suyos. Cuando comas con los dedos utiliza la mano derecha porque la izquierda está reservada para cuando se va al servicio. El matrimonio concertado entre dos familias es todavía un tema de actual.
Puedes disfrutar del sol en las playas del litoral e ir de excursión a lo alto de las montañas Ghats Occidentales en donde el clima es fresco. Disfruta de las tranquilas y templadas estaciones climáticas de Kodaikanal y de Udhagamandalam.
Penetra en los bosques tropicales de los Ghats Occidentales para hacer un safari fotográfico.
No dejes de ir a Pondicherry para descubrir el fasto de la antigua factoría colonial francesa y sus impresionantes residencias todavía bien conservadas.
Tómate un tiempo para callejear en las ciudades-templos de Madurai y Chidambaram y en ciudades santas como Kanchipuram.