Situada en un collado en el corazón de Italia, Perugia tiene su centro en la plaza del 4 de Noviembre, donde también están ubicados los principales monumentos de la ciudad. En su centro se alza la Fuente Mayor, construida en el siglo XIII según los planos de San Bevignate, y está adornada con bajorrelieves de Giovanni y Nicola Pisano. En la plaza se puede ver la catedral de San Lorenzo, dentro de la cual se encuentra la hermosa Deposizione de Federico Barrocci, y el austero Palacio de los Priori, construido entre los siglos XIII y XIV. Desde la entrada, por la via Vannucci, se accede a la Galería Nacional de Umbría, que acoge importantes obras de arte. Sin embargo, en el subsuelo, Perugia posee oculta otro rostro, el de una ciudad orgullosa de su independencia y que no acepta las injusticias. Rocca Paolina, construida entre 1540 y 1543 como símbolo de la dominación papal, nunca fue tolerada y fue arrasada en 1860. Pasando por una serie de escaleras, desde la plaza de los Partisanos, se puede recorrer un itinerario que te llevará a través de los restos de la Rocca y las ruinas de las casas medievales.