Sibari

Si no te acuerdas de las referencias geográficas, digamos que, de la bota, es la planta del pie. La región de Sibari se baña en el golfo de Tarento. Una estrecha llanura costera separa las montañas del agua. Esta tiene una rica zona agrícola y hoteles dispersos por el pinar a lo largo de inmensas playas. ¿Te suena la expresión «ser un sibarita»? En el siglo VI a.C., Sibari era una de las ciudades más potentes y pobladas de la Magna Grecia, y se hizo famosa por su lujo, su opulencia y su población indolente. La ciudad actual de Sibari no tiene este prestigio y solo cuenta con 5000 habitantes. Pero todavía resultar agradable vivir en este paisaje tan apacible.
El aeropuerto internacional más cercano es el de Lamezia Terme, que está situado a dos horas de coche más al sur.

El Parque Nacional del Pollino, entre Calabria y Basilicata, es perfecto para dar un paseo. Es el parque natural más grande de Italia y uno de los más bonitos del sur de Italia. Te encontrarás ante un bosque de hayas e inmensas praderas floridas en un paisaje típico de montaña pequeña.

El rico pasado de Sibari y su región pueden descubrirse visitando el Parco Archeologico della Sibarite. Este parque reagrupa los restos de tres lugares que se sucedieron en el tiempo: la rica ciudad aquea (Sibari), Turios construida por los atenienses y, por último, Copia, la colonia latina.

En verano, las temperaturas suben hasta los 35º C, incluso 40º C en el interior. Así que no vayas en julio ni agosto, la mejor época es primavera, o septiembre o principios de octubre. El agua de mar estará bastante caliente para bañarse, pero los días ya no serán tan sofocantes.

Evita hacer comentarios fuera de lugar sobre la religión, los italianos son muy creyentes. No hables de la mafia (NDrangheta en Calabria), el tema sigue siendo delicado.

Calabria, rodeada por el mar y cubierta por la montaña, ha desarrollado una cocina local, sencilla, pero generosa y sabrosa, con carne y pescado. Entre los productos locales, destacan una panceta buenísima, unas aceitunas excelentes, quesos y buenos vinos como el Greco di Bianco. O la pitta impigliata, una masa quebrada rellena con frutos secos. Hay que destacar en cuanto a los dulces que la región es una gran productora de bergamota.

Calabria es un destino gastronómico: vino blanco fino y licores, regaliz, bergamota, aceitunas... No podrás dejar de pensar en sus múltiples productos locales. Qué mejor que prolongar el buen sabor de boca de las vacaciones en casa.