Lituania es el país más bajo de la región báltica (la cima más alta culmina a 300 metros!). Sin embargo, los paisajes son variados con miles de lagos, riberas sinuosas, bosques centenarios y viejos pueblos. Hay cuatro estupendos parques naturales en el interior de estas tierras.
Lituania dispone de cuatro Parques Nacionales con hábitat natural protegido, donde viven sobre todo jabalíes, lobos y ciervos. En los bosques crecen pinos, abedules, alisos y álamos temblones en abundancia.
Lituania, muy auténtica, insiste en conservar sus tradiciones: Con su folclore, compuesto de danzas y cantos. Con su gastronomía, en la que se rebelan los insólitos sabores de la cocina karaíta. Con sus celebraciones religiosas y festivales, que dan lugar a una gran cantidad de festejos.
Hay varios lugares insólitos que no te puedes perder en Lituania. Así, cerca de Vilnius descubrirás el centro geográfico de Europa (definido como continente) y un emplazamiento arqueológico, el de Kernave, donde se escribieron las primeras páginas de la historia lituana, siguiendo con una extensa tradición de hábitat, que empezó en el Paleolítico.