Al norte de Tulear, a unos treinta kilómetros y 3/4 de hora en coche, Ifaty agrupa los pueblecitos balnearios de Ifaty y Mangily.
Colmado, escuela, tascas... Disfrutarás descubriendo a fondo la vida en estos pueblos de pescadores.
La playa no es la más bonita de Madagascar, pero también es agradable. Los tranquilos hoteles, todavía poco numerosos, son a escala humana.
Aquí no hay discotecas, pero sí aldeanos que organizan fiestas al aire libre. Desde luego que si lo que quieres es salir de noche para ir a lugares muy animados, Ifaty no es el sitio adecuado.
Aquí todo es lujo, calma y voluptuosidad. Mientras los hombres pescan, las mujeres venden sus frutas, siempre sonrientes y con la cara cubierta por una mixtura a base de corteza de árbol. Según parece, este producto embellece la piel...
Ifaty tiene puntos internacionalmente conocidos para practicar el submarinismo. También puedes pasear en piragua o visitar el bosque de baobabs y de plantas medicinales. Algunos te propondrán hacer excursiones en vivaque (especie de canoa) a Anakao, o en pueblos de pescadores como Ambolimailake.
No debes irte de Ifaty sin haber visitado su insólito pueblecito de pescadores, con sus mujeres con la cara recubierta de corteza de árbol y sus alegres niños. Hasta podrás entrar en el colegio durante el patio.
No te dejes la gorra, la crema solar... El sol pega fuerte en Ifaty...
Un consejo para los paseos en piragua: te los propondrán a menudo. Así que no salgas sin un piragüista que conozca la zona, hay corrientes peligrosas. Infórmate en el hotel o en el restaurante donde suelas comer. Calcula unas dos horas de piragua. Si es para todo un día, debes saber negociar la comida. Se debe evitar la temporada de los ciclones (finales de diciembre-primeros de abril).
Las mariscadas son deliciosas y aún mejores aquí a orillas del mar...
Podrás traer de Ifaty un poco de vainilla que encontrarás en los hoteles o en el pueblo...