Alesund es una ciudad completamente diferente de las demás ciudades noruegas. Destruida en 1904 a causa de un incendio, se volvió a construir con las ayudas enviadas por el emperador Guillermo II. Su estilo modernista y sus tonos pasteles hacen de ella una ciudad especial.
Hoy en día es uno de los puertos de pesca más grandes de Noruega y exporta mucho bacalao. Rodeada de montañas y construida en tres islas comunicadas por puentes, Alesund es una ciudad agradable en donde se callejea muy a gusto. Sube al Monte Aksla para disfrutar de las mejores vistas de la ciudad. Se accede por el parque municipal, subiendo por una escalera de 418 escalones.