Publicado el 14/03/2019
Viajar al sur de Francia resulta una idea un tanto tentadora cuando lo que se pretende es visitar maravillas que quedan muy lejos de las grandes metrópolis. Por ello, aquí os dejamos algunas ideas para disfrutar de lugares
Esta isla francesa se encuentra en medio del mar Mediterráneo, entre Francia e Italia. Tiene un paisaje rico y diverso donde caben gustos de todo tipo: desde playas con aguas templadas y cristalinas hasta grandes cordilleras e inmensos bosques donde perderse. Córcega es el destino perfecto para aquellos que aman estar en contacto con la naturaleza así como practicar deportes como snorkeling, buceo o senderismo. Uno de los lugares que más llaman la atención es la Reserva Natural de Scandola, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1983, un tesoro para los amantes de la fotografía en espacios abiertos. - © Eugene Sergeev/ 123RF
A nadie le podría decepcionar una ciudad como Niza. El Paseo de los Ingleses, con un recorrido de alrededor de siete kilómetros con vistas a la costa, constituye la imagen más reconocible de Niza en todo el mundo. A los amantes del mar les encanta visitar este lugar donde las playas tienen una belleza indiscutible. Además, también es un destino perfecto para aquellos viajeros cuyo objetivo es pasar unos estupendos días descansando y viviendo el mundo de la noche, no puedes perderte ir a algunas playas como Beau Rivage, las cuales tienen DJs para que puedas bailar hasta el amanecer. - © freeartist/ 123RF
Tras París, Marsella es la segunda ciudad con más habitantes de todo Francia y además también se trata del puerto comercial más importante del país y uno de los más importantes del Mediterráneo. Al ser una de las ciudades de mayor importancia en el país galo, se puede optar por un buen plan entre un amplio abanico de eventos. Para los más curiosos, se pueden visitar algunos museos como el Museo de Civilizaciones Europeas y Mediterráneas o el Museo de Historia de Marsella. También destaca por su belleza la playa de la Couronne o la basílica Notre Dame de la Garde, donde se podrán obtener las mejores vistas de toda la ciudad. - © elwynn/ 123RF
A este pequeño pueblo francés no le hace falta tener grandes extensiones para ser el lugar favorito de muchos viajeros, aunque continúa siendo uno de los tesoros escondidos de Francia. Cassis es conocido por la belleza del paisaje que dejan sus pintorescas casas de diferentes colores a lo largo de unas playas de ensueño. Además de ser un lugar ideal para conocer un poco más a fondo la cultura de Francia, también tiene su lado exótico: en el Massif des Calanques (cerca de Cassis) puedes encontrar aguas de color turquesa que se asemejan a las del Caribe a la vez que los acantilados te dejarán unas vistas impresionantes. Una excursión en barco es lo ideal para observar un poco más de cerca su paisaje marítimo, al igual que ir a uno de sus miradores y guardar en la retina algunos de los mejores momentos de este viaje. - © Christian Offenberg/ 123RF
Seguramente habrás escuchando muchas veces en la vida hablar sobre la preciosa ciudad de Cannes, entre otras cosas debido a su importancia por el que posiblemente se puede tratar del festival de cine más famoso de Europa y uno de los más importantes a nivel mundial. Lo que separa a Cannes de otros destinos de playa son sus edificios, los cuales son un ejemplo perfecto de la arquitectura francesa Art Nouveau. El Boulevard de la Croisette es una visita obligada para todos los viajeros a los que les guste llevarse consigo un recuerdo fotográfico, ya que está repleto de hoteles clásicos del estilo Belle Epoque, como el excepcional InterContinental Carlton Hotel. - © www.figurniy.com/ 123RF