Publicado el 10/03/2017

#Naturaleza #Italia

Cinque Terre: las cinco maravillas de Italia

Escondidas en la costa escarpada de la Riviera italiana, las ciudades rústicas del Cinque Terre presumen de tener una mezcla única de cultura italiana y naturaleza, repartidas en pequeñas partes preciosas de color pastel.

Manarola

A pesar de ser la más pequeña de las cinco, esta ciudad pintoresca tiene mucho ambiente y un puerto lleno de barcos atracados. Hay muchos lugares fantásticos para comer y beber (Manarola es famosa por su vino dulce), y muchas cuevas y rocas por explorar alrededor de su pequeña zona para nadar. - © kasto/123RF

Monterosso

Llena de coches y de hoteles, con una playa repleta de sombrillas amarillas y una vida nocturna más animada que las otras, Monterosso es la única ciudad resort del Cinque Terre. Aun así, su centro histórico sigue teniendo mucho encanto, con su laberinto de calles pequeñas, bares y tiendas. - © Martin MOLCAN

Riomaggiore

Un mágico entramado de casas color pastel, con el eje central en Via Colombo, donde encontrarás una gran variedad de cafeterías, bares, restaurantes y uno de los mejores helados de Italia. - © Krisztian Miklosy

Vernazza

Esta localidad también es conocida como la joya de Cinque Terre. La mayoría del bullicio viene del puerto, con sus restaurantes curiosos y un bar que cuelga del extremo del castillo. Cada jueves, la ciudad alberga su mercado callejero de productos locales semanal. - © Martin MOLCAN

Corniglia

La más tranquila de todas y la única de las cinco que no está al nivel del mar. Un sendero sube 400 escalones hasta llegar hasta la cima de la curiosa colina, desde la que tendrás unas vistas impresionantes. - ©Marco Saracco/123RF

Localizado en la Costa Ligure di Levante, parte de la provincia de La Spezia en la Riviera italiana, se encuentra Cinque Terre, una de las áreas mejor preservadas del Mediterráneo, hogar de cinco preciosas ciudades rodeadas de una naturaleza impresionante.

A lo largo de 8 kilómetros de una costa preciosa pero pedregosa están Riomaggiore, Manarola, Corniglia, Monterosso y Vernazza, que forman un Parque Nacional protegido por la Unesco. Gracias a razones históricas y geográficas, no se puede construir demasiado en esta zona, por lo que se queda un paisaje precioso, libre de atascos.

Un viaje a Cinque Terre es una alternativa más tranquila a algunos de los resorts más concurridos de la Riviera. Estas ciudades mantienen sus tradiciones, y cada una tiene su propio dialecto y patrimonio del que estar orgulloso.