Israel se convierte cada año en un importante polo de atracción de religiosos, peregrinos y turistas en busca de vivir la Pasión de Cristo en la mismísima Tierra Santa. Uno de los grandes momentos es el Domingo de Ramos, que rememora la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén antes de ser juzgado y crucificado. La procesión, en la que los asistentes portan palmas y ramas de olivo, comienza en el Monte de los Olivos, en la Iglesia de Betfagé, y termina en el templo de Santa Ana, en la ciudad vieja. El colofón de la Semana Santa está protagonizado por los actos del Domingo de Resurrección, una de las grandes fiestas para todos los cristianos del mundo que en Jerusalén cobra una emoción especial por la cantidad de fieles congregados. Esta celebración tiene lugar cada año en el Santo Sepulcro de Jerusalén, donde se encuentra la tumba vacía de Cristo. Junto a estos atractivos espirituales, Israel es un lugar cargado de rincones para visitar gracias a un legado que conjuga monumentos del judaísmo, el islam y el cristianismo. Un conglomerado de historia y cultura que está al alcance de tu mano gracias a la propuesta de nuestro colaborador Vamos de Viaje que permite conocer en nueve días las principales ciudades del país, desde Tel-Aviv hasta Jerusalén, pasando por Galilea, Nazareth y Belén, entre otros lugares.