¡Una atracción digna de Disneyland! Quedas advertido antes de entrar con el cartel que dice que entras en el London Dungeon por tu cuenta y riesgo. En un ambiente oscuro, acompañado de gritos de terror y maullidos de gato, sigues los pasos de Jack el destripador y de otros personajes inquietantes de la historia británica, revives el terrible incendio de Londres de 1666, subes a bordo de un tren fantasma y haces una caída libre que te dejará helado. La visita dura más de una hora y está llena de encuentros con personajes de cera, pero también con actores de carne y hueso que te harán temblar de miedo. El recorrido rebosa de espectáculo, experiencias inéditas y reconstrucciones de escenas de torturas, y en él te cruzarás con un feroz perro rabioso, un enfermo con la peste negra que te estornudará encima, esqueletos, fantasmas y otros zombis. Mejor que se abstengan las personas sensibles...