Singapur, dragón de Asia situado entre Malasia e Indonesia, no es simplemente un aeropuerto de paso de camino a Bali o Australia. El tercer centro financiero mundial despliega sus rascacielos, como si de Manhattan se tratase, en el cruce de Asia. Pero la ciudad estado tiene tanto que ofrecer a los visitantes, que se quedarán embriagados por su extraordinaria atmósfera multiétnica en los diferentes barrios de Chinatown, Little India, Arab street o en el barrio colonial, donde se mezclan pagodas, templos, mezquitas y catedrales. Durante tu viaje a Singapur no te aburrirás ni un segundo entre sus numerosos festivales, museos, la vida nocturna animada, una gastronomía famosa por ser una de las mejores de Asia y sus numerosas posibilidades de ocio. Zoo y safari nocturno famosos mundialmente, playas paradisíacas en los islotes de los alrededores, la calle más grande del mundo, simulador de vuelo, puenting e incluso un gran premio nocturno en septiembre. La ciudad del león ofrece una auténtica fusión de culturas asiáticas, un paraíso para las compras con perspectivas de hacer negocio. El visitante puede aprovechar la ocasión para probar el nuevo crucero aéreo, A380 con Singapore Airlines...
Admira Indonesia, Malasia, el bosque de rascacielos de Singapur y una de las concentraciones más importantes de cargo del mundo en lo alto de Singapur Flyer, la noria más grande del mundo con 165 m (más grande que la London Eye), cómodamente instalado en grandes cabinas con cristaleras. El paseo dura 37 minutos. Singapur propone otras actividades de ocio originales como puenting o un simulador de vuelo. Otra experiencia interesante: dejar que te masajeen los pies peces que te muerden los dedos. Puedes hacer un pequeño crucero por Singapore River para descubrir el centro de la ciudad o alquilar "bumboats" (sampanes a motor), para descubrir las islas cercanas, asistir a un concierto, una obra de teatro o una opera en el Victoria Theatre and concert hall (que recuerda la ópera de Sidney).
¡Ir de compras, por supuesto! Recuerda que se extiende una ciudad subterránea a tus pies, una especie de galería comercial gigante climatizada en la que puedes encontrar gangas.
¡No olvides la naturaleza! Vive la experiencia única del safari nocturno en un bosque secundario, cerca del zoo de fama mundial, con la colonia más importante de orangutanes del mundo. También puedes hacer senderismo por la reserva natural de Bukit Timah, el último sector de selva virgen primaria que todavía conserva la isla.
Singapur ofrece bonitas playas, así que no te olvides el bañador. Te aconsejamos las de la isla de Sentosa.
En el barrio colonial: la catedral de San Andrés; el memorial en honor a los 50 000 singapureños muertos durante la ocupación japonesa de 1942 a 1945; el ayuntamiento que data de 1929, donde se declaró la independencia de Singapur en 1965; el tribunal supremo y su estructura en forma de platillo volante diseñado por Sir Norman Foster; el antiguo tribunal supremo y su cúpula, miniatura de la de San Pablo en Londres (edificio de 1937); los museos (museo de historia de Singapur, museo de Civilizaciones Asiáticas, museo Nacional, museo de Arte; el sitio donde atracó el fundador de Singapur, Sir Thomas Stamford Raffles, el 28 de enero de 1819; el Merlion, símbolo de Singapur, mitad león mitad pez que escupe agua al pie de los rascacielos del centro financiero; el majestuoso hotel Fullerton, edificio neo-clásico donde se encuentra correos; el mítico hotel Raffles; Clarke Quay y sus bares, discotecas y restaurantes de moda; Boat Quay y sus direcciones más clásicas; el zoo de Singapur; el jardín botánico; Chinatown; Little India; Arab street; Orchead road, el paraíso de las compras.
Si estás de paso durante unas horas y el tienes tiempo suficiente, puedes efectuar una visita gratuita de la ciudad (pregunta en el mostrador especial del aeropuerto de Changi). La legislación en Singapur es muy estricta (ni chicles ni cigarrillos). El tráfico de drogas se puede castigar con pena de muerte. Aunque el aire es muy húmedo (75%), el calor omnipresente puede causar problemas de deshidratación. No olvides beber en cantidad abundante. Recuerda que se conduce por la izquierda. Para los desplazamientos cortos, no dudes en probar los cochecitos chinos: tirados por una bicicleta, este medio de transporte original y tradicional es una ganga. Puedes negociar la carrera. Bali y Phuket están a sólo 2 h de avión, Indonesia a 30 minutos en barco, Malasia a 45 minutos en coche, Malacca y su estrecho a 2 h por carretera y Kuala Lumpur, la capital, a 4 h por carretera. La ocasión de combinar playa, compras y cultura.
Fumar en la calle a menos de 5 m de algunos hoteles te costará 500 euros de multa. No tires el chicle al suelo, ya que les cuesta incluso tolerar que lo mastiques. El tráfico de estupefacientes se puede castigar con pena de muerte. Pueden realizar un control a la entrada del país. Si da positivo, la persona puede ser acusada de haber consumido droga in situ.
Sin lugar a dudas uno de los lugares gastronómicos más importantes de Asia, Singapur propone una increíble cantidad de restaurantes con una gran variedad de especialidades a precios módicos. Cocina china (cantonesa, hainan, hokkien, sichuan, teochow), pescado y crustáceos, cocina vegetariana, india, malasia, indonesia, nyonya, tailandesa, japonesa, coreana, birmana, taiwanesa, italiana o francesa. Hay para todos los gustos y a todos los precios, de la sencilla cantina a los restaurantes refinados de los grandes hoteles. Pero para comer en un periquete disfrutando de los mil sabores asiáticos, hay que ir a un "hawler centre". Los "hawkers" eran antaño vendedores ambulantes que vendían sus especialidades en las aceras, con pequeños taburetes y mesas. En estos sitios, un plato único cuesta de 3 a 5 $. No dejes de hacer una pausa y acudir a Long Bar, situado en el primer piso del hotel Raffles, para degustar su famoso cóctel Singapore Sling. El único lugar en Singapur donde puedes tirar algo al suelo, ¡más precisamente las cáscaras de los cacahuetes!
Singapur es un gran destino para las compras, aunque ya no se encuentran tantas gangas como antes. Objetos de arte, antigüedades, artesanía, equipamiento electrónico, perfumes, ropa, relojes, cámaras fotográficas: encontramos de todo en los diferentes barrios de la ciudad y en los inmensos halls del aeropuerto de Changi. Normalmente, los grandes almacenes y los centros comerciales abren de 10:00 a 21:00 h, incluso 21:30 h. En el centro comercial musulmán Mustapha en el barrio de Little India, encontrarás de todo: joyas, ropa, electrónica, alimentación...excepto tabaco, alcohol y carne de cerdo. Para las grandes marcas, vete a Orchead Road, los Campos Elíseos locales, donde encontrarás el hard rock café y las tiendas Armani, Cartier, Vuitton y Chanel. Sin embargo las mejores gangas se encuentran en las rebajas del Great Singapore Sale en junio y julio.