Kara es la segunda ciudad más importante de Togo y capital de los kabiyes, "campesinos de piedras", que cultivan minuciosamente sus jardines a lo largo del río que atraviesa la ciudad. Viven en soukalas, pequeñas cabañas redondas con techos cónicos y unidas entre si por pequeños muros de piedra. Los principales puntos de interés son los mercados y la artesanía de los pueblos de los alrededores.