Phan Thiet, antiguo puerto del reino de Champa, conserva una gran tradición comercial. Mientras que las idas y venidas de los pescadores animan la vida de una parte de la población, los turistas se relajan en la playa de arena blanca, encaramándose sobre estas dunas que parecen salir de la nada.
Asistir a un curso de cocina vietnamita en el Bien Dua Resort, un hotelito a pie de playa. Aprender a hacer nems, arroz cantonés o buñuelos de plátano para comértelos después (5 euros).
Los barcos de colores de los pescadores en el río de Cati que atraviesa Phan Thiet. Estos pescadores faenan de noche con lámparas que atraen a calamares y sepias.
Embalar bien el nioc man si te lo traes ya que el olor a pescado de la ropa podría no irse nunca y no visitar la fábrica de nioc man si tienes el estómago revuelto.
Alquilar trineos a los niños en las dunas de arena de Phan Thiet.
El nouc Man de PhanThiet es famoso en todo Vietnam.
Café, anacardos y nuoc man de PhanThiet.