Ngor es una isla de pescadores a la que se cruza en barco de madera, con un pequeńo motor, de aguas muy limpias. A Gorée se llega en ferry, y aún queda en ella el triste testimonio de un depósito de esclavos, hoy convertido en museo. En la isla se pueden apreciar, además, otras edificaciones del tiempo colonial.

Su color se debe a los azufres y algas que albergan sus aguas. Es punto de interés porque ha sido el destino del Rally París-Dakar. De él se extrae sal, y sus aguas son tan densas que te hacen flotar. Conviene ir hasta allí en 4x4, puesto que descubrirás unas dunas espectaculares.

Visita la playa de Yoff, para descansar y degustar delicioso pescado frito. Para ver la mejor puesta de sol, ve a la Playa de los Almadíes, y sigue tu recorrido costero por St. Louis, Virage y los bellos acantilados.

Esta soberbia construcción data de 1964, y fue ofrecida a la ciudad como obsequio del rey Hassan II de Marruecos. Integra un centro de enseńanza e investigación del Islam, y puede ser visitada por todos.

Inaugurada en 1983, ofrece interesantes exposiciones de artistas plásticos senegaleses y extranjeros, residentes y de paso. Es una buena opción, con propuestas variadas y de gran nivel.