Brisbane goza de un gran desarrollo arquitectónico y el mejor lugar de la ciudad para apreciarlo en todo su esplendor es el Distrito Industrial de Brisbane, donde podrás ver los edificios más altos de Australia, como el edificio Soleil, de 243 metros de altura. La arquitectura de esta ciudad, la tercera más poblada del país combina un aire muy urbano y moderno justo al pie del río Brisbane.

Sin dudas uno de los iconos de Brisbane, el famoso Story Bridge, construido en 1940, es un monumento impresionante y una visita obligatoria para cualquier turista. Si eres un espíritu libre y te gusta la aventura, puedes escalar este puente. No dejes de acercarte a verlo por la noche, sus luces pueden regalarte la fotografía más perfecta.

La ciudad cuenta con gran cantidad de áreas de recreación que también vale la pena conocer, entre ellas South Bank Parklands, Roma Street Parkland, el Jardín Botánico de la Ciudad, el Bosque de Brisbane y Portside Wharf, el famoso muelle. Si eres amante de los animales, el primer santuario de koalas, Lone Pine Koala Sanctuary, se encuentra en esta ciudad.

Siguiendo con la naturaleza, el zoológico de Brisbane es una atracción imperdible que nada tiene que ver con otras reservas floro-faunísticas que hayas visto en otras partes del mundo. Los animales más exóticos te esperan por aquí. Un dato interesante es que el famoso Steve Irwin fue su mayor representante.

Ale House es probablemente el lugar más interesante de Brisbane para aquellos que deseen saborear las bebidas locales. Además de poder hacer un recorrido de las instalaciones, también se pueden aprender datos interesantes sobre los distintos tipos de cerveza. Lo mejor de todo, al final de la visita se pueden degustar las mejores cervezas negras de Brisbane. ¿A qué esperas?