En este pequeño pueblo se elabora la bebida mexicana por antonomasia del cual toma su nombre. Toda la zona tequilera fue nombrada por la UNESCO Patrimonio Mundial de la Humanidad, por lo característico de su paisaje. La visita permite conocer cómo se elabora esta bebida y los lugares más emblemáticos relacionados con ella como la casa de la familia Sauza o la fábrica de Tequila Cuervo que ofrece visitas guiadas. Pero también es cuna de tradiciones antiguas que no te dejarán indiferente.

El centro de la ciudad de Guadalajara tiene un gran valor histórico y es una visita obligada, cuenta con varios monumentos civiles y religiosos que no podrás dejar de visitar. Algunos de ellos son la Biblioteca Iberoamericana, que data del 1591, la catedral metropolitana, mandada construir por Felipe II o el Palacio de Gobierno, entre otros.

Otro de los elementos más característicos de Guadalajara son los mariachis, en esta plaza podrás contemplar un busto en bronce de una de las figuras más insignes de este tipo de música. En ella podrás escuchar sus canciones las 24 horas del día así como degustar algunos platos típicos de la cocina de la zona.

La deliciosa cocina mexicana toma aquí sabores propios, con recetas que cuentan con años de tradición. Tanto platos dulces como salados con aromas y colores característicos de la región, uno de los más tradicionales son las tortas ahogadas, elaboradas con un tipo de pan especial y bañadas en una deliciosa salsa.

La ciudad de Guadalajara cuenta con numerosos parques y jardines, como el Bosque la Primavera, considerado el pulmón de la ciudad, el Parque Mirador Independencia, con impresionantes vistas, situado cerca del cauce del río Santiago, o el Cerro de la Reina, ubicado a 2.500 metros de altura, el lugar ideal para contemplar la ciudad.