A unos 20 kilómetros de la ciudad encuentras esta necrópolis que es uno de los lugares más conocidos de todo el país y que está protegido como Patrimonio de la Humanidad. Destacan sin duda sus tres pirámides: la de Keops, la de Kefrén y la de Micerinos. También forma parte del conjunto la Esfinge.

Esta mezquita se encuentra en la zona antigua de la ciudad y, como tal, forma parte del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. La mezquita fue fundada en el siglo X, aunque ha sufrido diversas modificaciones desde entonces. ¡No te la pierdas durante tu estancia en el país!

Esta mezquita es de construcción mucho más reciente, pues data del siglo XIX, pero sin duda es mucho más espectacular que la de al-Azhar. Su arquitectura es similar a la de Santa Sofía, en Estambul, con sus 4 minaretes y su cúpula central de 52 metros de alto. Podrás visitar la mezquita de 8 a 18 horas.

Durante tu estancia no puedes dejar de pasear por el casco histórico de la ciudad pues, como se ha mencionado antes, forma parte del Patrimonio de la Humanidad. La protección cubre 524 hectáreas e incluye Al-Fustat, la mezquita de Ahmed Ibn Tulin y tres necrópolis.

Si te gusta la historia egipcia, no puedes perderte el Museo de Antigüedades Egipcias, donde se conservan objetos del Antiguo Egipto. Este museo recibe más de dos millones y medio de visitas cada año y se encuentra en la plaza de Tahrir. El edificio que acoge el museo es de estilo neoclásico y tiene un color que no pasa desapercibido.