Este templo musulmán, con sus 69 metros de alto, es el edificio más alto de la ciudad además de su mezquita más importante. Terminó de construirse en el año 1158 y en su época fue una de las mezquitas más grandes de todo el mundo islámico. Los no musulmanes no pueden visitarla por dentro, pero su figura resulta espectacular.

El corazón de la ciudad es esta plaza y tras tus vuelos no puedes dejar de visitarla, disfrutando del animado ambiente tanto de día como de noche, viendo a los malabaristas, los vendedores de zumos, los aguadores, los adiestradores de monos y serpientes, los puestos de comida típica... ¡disfruta de esta importante plaza!

Si has estado antes en un país árabe sabrás de la importancia y atractivo de sus zocos, y el de esta ciudad no es para menos. Piérdete momentáneamente por sus laberínticas calles viendo los puestos agrupados por gremios y regateando con los vendedores para conseguir buenos precios en tus souvenirs.

Esta escuela islámica es la madraza más importante de la ciudad y llegó a acoger a 900 alumnos. Terminó de construirse en el año 1565 y cuando tus vuelos Bilbao - Marrakech tomen tierra no dudes en entrar a visitarla, disfrutando de su espectacular patio central y admirando la sencillez de las celdas de los estudiantes.

Este palacio, junto con sus patios y jardines, ocupa ni más ni menos que 8 hectáreas. Sus 150 habitaciones se crearon para acoger a las 24 concubinas y a las 4 esposas de Abu Bou Ahmed. Es una de las obras arquitectónicas más importantes de la ciudad, por lo que merece una visita, aunque el palacio luce algo vacío después de que lo desvalijaran.