Es el edificio más alto de la ciudad con sus 440 metros de altura. En el piso 103 puedes disfrutar de un mirador con vistas panorámicas de la ciudad que no dejan indiferente a nadie y que además cuenta con una zona de suelo acristalado para dar la sensación de que se está parado sobre la nada.

Este parque público no solo ofrece una zona libre de edificios por la que pasear sino que cuenta con una amplia colección de arte y arquitectura. Dentro de este parque puedes encontrar la famosa escultura de "The Bean", que es uno de los símbolos de la ciudad y recibe gran número de turistas al año.

Este muelle de la ciudad se construyó a principios del siglo XX y en su época fue el mayor embarcadero del mundo. Actualmente alberga un parque de atracciones, restaurantes y bares. Es el lugar ideal para divertirse y para disfrutar de un bonito día en familia o con los amigos.

Esta fuente se ha convertido en un icono de Chicago y es una de las fuentes más grandes del mundo. Cuenta con 85 metros de diámetro y 134 caños que lanzan el agua a 46 metros de altura. Está ubicada en el Grant Park y durante 20 minutos cada hora realiza una exhibición de chorros.

Este complejo ubicado en el centro de la ciudad es una escuela y museo de arte. Permanentemente se exponen 300.000 obras y cuenta con una de las mejores bibliotecas centradas en el arte y la arquitectura de todo Estados Unidos. Si eres un apasionado del arte, no dudes en apuntarte a una visita guiada.