Este conjunto de palacios y edificios que datan del siglo IX está considerado como el castillo más grande del planeta. No dejes de visitarlo tras tus vuelos a Praga desde Palma de Mallorca, pues en su interior podrás visitar la Catedral de San Vito, el Callejón del Oro, el Antiguo Palacio Real, la Torre Negra y otros lugares de interés.

Es la catedral más importante de la ciudad. Comenzó a construirse en el año 1344 aunque no se terminó hasta 1929. En su interior se conserva la tumba de Wenceslao IV y las Joyas de la Corona. Desde su torre se consiguen unas vistas espectaculares de la ciudad, por lo que si tienes la oportunidad de subir, no lo dudes.

Este reloj medieval es el más famoso no solo del país sino también del mundo entero. El relojero Hanus lo construyó en 1490, aunque en el siglo XVI fue perfeccionado por Jan Taborsky. Se localiza en el edificio del ayuntamiento y está formado por unas figuras animadas, un calendario y el reloj astronómico en sí.

Este puente comunica la Ciudad Pequeña con la Ciudad Vieja. Es uno de los monumentos más famosos de la ciudad y tras tus vuelos entre Palma de Mallorca y Praga no debes perderte las estatuas que lo bordean, cuyos originales se exponen en el Museo Nacional.

Esta torre no te pasará desapercibida, pues su fachada ennegrecida es fácilmente reconocible. Es de estilo gótico y se localiza en la entrada del casco histórico de la ciudad. Fue construida en el 1475 como puerta de la muralla, aunque actualmente en su interior hay una exposición sobre la historia de la ciudad y sus torres.