La capital vallisoletana es la ciudad perfecta para ahondar en la historia de algunos de los acontecimientos más importantes del país. Ciudad que vio nacer a ilustres personajes desde Felipe II a Miguel Delibes y donde tuvieron lugar sucesos trascendentales como la boda de los Reyes Católicos. Entre sus lugares más emblemáticos se encuentra su Plaza Mayor, punto de encuentro para todos los que visitan la ciudad, así como su catedral y las importantes iglesias de las que está plagada la ciudad como la de San Pablo, que data de 1286 o La Antigua. Tomar un vuelo a Valladolid en primavera te permitirá conocer una de las Semanas Santas más importantes de España y disfrutar de sus más arraigadas tradiciones. Pero además de historia y cultura, los vuelos a Valladolid te permitirán descubrir el mundo del vino con denominaciones de origen tan notorias como Ribera del Duero, o los vinos blancos de Rueda. Tendrás la oportunidad de visitar algunas de las bodegas más emblemáticas y disfrutar con una gastronomía exquisita, cuyo plato estrella es el lechazo.
Es fácil desplazarse por Valladolid, aunque su centro histórico se puede recorrer a pie. No obstante, para llegar a un punto más alejado, esta ciudad cuenta con una moderna flota de autobuses urbanos muy cómodos y modernos y con una gran variedad de rutas. También es posible visitar la ciudad en el bus turístico para poder ver en un solo recorrido las partes más importantes de la ciudad. Si viajas con niños, aprovecha tu vuelo para llevarlos a Campo Grande, uno de los parque urbanos más espectaculares, donde podrán ver animales o pasear en barca. Además, tanto en la ciudad, como cerca del aeropuerto, la ciudad cuenta con estupendos establecimientos hoteleros donde pasar unos fantásticos días.